RAYO VALLECANO I LA ENTREVISTA
Isi: “El buque insignia del Rayo no soy yo, somos todos”
El de Cieza termina esta 22-23 como el pichichi de la Franja, con nueve goles, los mismos con los que lo logró en la 20-21 en Segunda. Es una de las grandes bazas del Rayo del mañana.
El extremo franjirrojo, de 28 años, ya recarga pilas. La temporada ha sido intensa para el Rayo y para Isi, su máximo goleador y asistente. El club vallecano le ha renovado hasta 2028 y le ha blindado con una cláusula que ronda los 50 millones. Está cotizado. Por algo es el jugador revelación de Primera...
—¿Qué balance hace de la temporada?
—Muy positivo. El último resultado de Mallorca no debe empañar la trayectoria que hemos tenido. Haber llegado a la última jornada optando a posiciones europeas es de valorar.
—¿Qué nota pondría al Rayo?
—A nivel colectivo, hemos estado de sobresaliente, tanto los que han participado más como lo que lo han hecho menos. Hay que pensar en la próxima temporada para seguir avanzando.
—¿Cómo ha sido ese momento de la despedida de Iraola y de tantos compañeros?
—Triste. Se van compañeros que además son amigos. Han sido tres años muy bonitos. También me siento orgulloso de ellos, de que puedan seguir creciendo y cumpliendo sus sueños. Aquí muchos de ellos han hecho historia y les deseo la mejor de las suertes. Se cierra un ciclo, pero pronto se abrirá otro.
—Ahora se respira nostalgia por esta etapa tan bonita.
—Si me pongo a recordar momentos... se me eriza la piel. Hemos vivido cosas muy emotivas e importantes para el club. El ciclo que se abre será importante porque significaría consolidarse en una categoría muy importante.
“Si me pongo a recordar momentos... se me eriza la piel”
—Se mantiene la espina dorsal de la plantilla.
—A los que se van, agradecerles el esfuerzo que han hecho por este escudo y a los que estamos, seguir apoyándonos. Me consta que la dirección deportiva está haciendo muchos esfuerzos para reforzar las posiciones que nos faltan y construir un equipo competitivo. Todo el mundo quiere venir al Rayo. Estamos en Madrid y hemos demostrado muy buen fútbol. La primera pieza del puzle es el cuerpo técnico. Y venga quien venga, estaremos encantados de ayudarle para que esto sea una familia como hasta ahora.
—Alguno de esos momentos vividos los lleva tatuados...
—¡El ascenso! Fue muy importante por cómo se dio, por el COVID... Pero me quedaría con las grandes amistades que he hecho y el día a día. Hemos disfrutado con el grupo y el míster.
“Quiero un Rayo que sea atrevido y compita para seguir creciendo”
—¿Le queda sitio para hacerse más tatuajes por si llegan logros importantes?
—Sí, sí. Ojalá, que me queda mucho. Aún he dejado un par de espacios en la pierna...
—¿Es consciente de que es el buque insignia del Rayo del futuro?
—No soy consciente (risas). Yo soy una persona sencilla, que disfruta mucho del día a día, que valora la compañía y el esfuerzo de los compañeros. El fútbol es algo colectivo. No depende sólo de uno, en este caso de mí. Eso es lo que nos ha llevado al éxito. Todos hemos aportado nuestro granito de arena. El buque insignia del Rayo somos todos, desde los trabajadores del club, hasta los jugadores.
—¿Cómo le gustaría que fuera el próximo curso, con el Centenario en el horizonte?
—Igual que estos últimos, con un Rayo que compita, que sea atrevido y que sigamos siendo una familia porque en el fútbol hay mucho ego y es difícil de gestionar en los grupos. Ojalá se puedan mejorar los números de esta temporada que acaba.
—La gente le tiene mucha fe a usted, De Tomás, Álvaro, Óscar Valentín...
—Hay que seguir creciendo porque lo que hemos hecho hasta ahora no sirve para nada. Queda en el recuerdo. Debemos ser ambiciosos.