Hay vida sin Kroos
El Real Madrid replica las estadísticas del curso pasado pese a la ausencia del alemán. En la 2023-24, el equipo sólo concedió una derrota en 20 partidos sin él en el once titular.
El Real Madrid sacrificó el pasado verano control para ganar vértigo, cambió posesión por pegada. Y desde que arrancó la temporada viene notando esa falta de fluidez y facilidad en el juego, si bien lo compensa con enorme eficiencia en las no demasiadas ocasiones que genera. Perdió esas cualidades para el dominio con balón cuando se confirmó que Kroos (34 años) no renovaba y se retiraba tras la Eurocopa de Alemania, al mismo tiempo que fue palpable que no acudiría al mercado a buscar un sustituto de ese perfil, apostando por una media de poderío físico y velocidad (Tchouameni, Valverde, Bellingham, Camavinga...). Y la realidad, sensaciones aparte, es que el paso del Madrid demuestra que hay vida sin Kroos.
El alemán ya arrancó el pasado curso con la etiqueta de supuesto suplente, empezando por el debut liguero en San Mamés. Pero al poco tiempo constató Ancelotti que le hacía falta ese perfil para engrasar el juego blanco en la media, aunque le fue dando descansos para preservarle físicamente de cara al tramo decisivo de la campaña. El plan funcionó, con Kroos y también sin él: el Madrid salió sin el teutón en el once 20 veces el curso pasado, con 16 victorias, tres empates y sólo una derrota, promediando 2,3 goles a favor y 0,8 en contra por partido.
No significa eso que Kroos no tuviese peso en ninguno de esos duelos: sólo se quedó sin minutos en siete de los 55 partidos que jugó el equipo en todo el curso. Y la realidad es que sin él, el Madrid va sobreviviendo también esta campaña, con números muy similares: 12 partidos, ocho victorias, tres empates y una derrota, con 24 goles a favor (dos por partido) y ocho en contra (0,7 por encuentro). El cómo cambia, pero el qué se mantiene: el Madrid saca adelante (casi siempre) los partidos. Y el cambio de estilo apenas se ha notado en las estadísticas del juego del equipo: son prácticamente idénticas en posesión (58%), en pases totales, en campo contrario y en el último tercio, en la eficacia de los desplazamientos (una variación de apenas 1%)... y hasta en los ataques de transición rápida, que tanto el curso pasado como en este eran 1,3 por encuentro.
Se evidencia que se puede sobrevivir, y hasta vivir plácidamente, sin Kroos, algo que Ancelotti ya anticipó en su primera rueda de prensa, en pretemporada: “Nos falta Kroos, pero tenemos todas las posibilidades para reemplazarlo. No como él, porque tiene mucha calidad, pero tenemos muchos recursos. Con él también queríamos jugar verticalmente”. Aunque, tras la primera derrota de la temporada, en Lille, y el empate en el derbi, reconoció el italiano que la ausencia del alemán a veces pesa demasiado: “No buscamos quién sustituya a Kroos, debemos adaptarnos a su ausencia. Es insustituible. Tenemos que encontrar otra manera de jugar sin él y la vamos a encontrar sin ninguna duda. No hemos mostrado todo nuestro potencial...”.
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