Gurpegui: “Necesito parar, reflexionar y darle una vuelta a lo que quiero en mi vida”

Rodeado de toda la plantilla del Bilbao Athletic, con signos de evidente complicidad, y su cuerpo técnico, Murillo, Armando, Lizarralde, Arkotxa, el presidente, Jon Uriarte, el segundo de Valverde, Jon Aspiazu, el director general, Jon Berasategi, entre otros, Carlos Gurpegui se despedía como técnico del filial y del club, por decisión propia y muy meditada, con un nudo en la garganta. No ha sido fácil verbalizarlo: “No es una decisión sencilla, llevo 26 años en el club. No me levanto un día y digo que no quiero ser entrenador del Bilbao Athletic. Sé lo que me aporta entrenar, me lo paso muy bien, pero sé a lo que renuncio si soy entrenador”, desliza. Por tanto, asevera que ahora emprende un paréntesis necesario en su círculo vital: “Necesito un tiempo para parar, reflexionar y darle una vuelta a lo que quiero en mi vida. Disfrutar de mis hijos, de mis padres, de mi familia, que llevo 26 años fuera de casa”, matiza de su salida de su pueblo, Andosilla, rumbo a Lezama, y añade: “Desde la calma voy a tomar mejores decisiones”, puntualiza.

No ha sido fácil su determinación: “Dudas ya tuve cuando terminó la temporada pasada. Vengo de jugar a fútbol una carrera deportiva diferente, con momentos delicados y tengo la sensación de que no me he quitado esa mochila de encima. Como entrenador te llevas muchas cosas a casa, con jugadores desde los 17 años a veintipocos años con los que tomamos decisiones que les afectan. Esas decisiones me las llevo a casa”, narra Gurpegui, que desvela que hasta en su entorno se han asombrado por inclinarse ahora por aparcar los banquillos, al menos de manera provisional: “Hay mucha gente que no entiende esta decisión, incluso en mi familia, pero tengo claras las circunstancias personales. Lo llevas mascando desde hace tiempo. He dudado, estar con estos tipos todos los días (mirando a los cachorros que copaban la parte de atrás de la sala de prensa)... , pero creo que es lo mejor para mí”, insiste. Aunque incluso Gurpegui es consciente de que se podría producirse un volantazo en los próximos meses: “Tengo claro a lo que renuncio como entrenador, igual en octubre me estoy tirando de los pelos”, lanza el exleón sonriendo.

Gurpegi, afirma modesto, que les ha enseñado a sus pupilos del filial “a no rendirse”, recordando el llamativo caso del volante bermeano Mikel Jauregizar, que empezó el curso en dinámica del Basconia, y ha acabado la presente campaña “ascendiendo y siendo campeón de Copa”, señala, advirtiendo que había resultado una pretemporada complicada tras el descenso y que empatiza “mucho” con todos sus jugadores, en pleno proceso de formación. Olabarrieta debutó ante el Sevilla, Egiluz en Copa en Rubí. Los frutos van saliendo en la fértil cantera de Lezama. “Sin duda, todo depende de ellos”, remarca, acordándose de Hugo Rincón, al que le ha faltado sólo debutar en Primera tras una decena de convocatorias con Valverde.

El director deportivo del Athletic, Mikel González, quiso rebajar el golpe moral de la marcha de Gurpegi, un emblema del club: “No nos estamos despidiendo, es una decisión valiente, esperamos que sea un punto y aparte y no un final. Tiene las puertas abiertas siempre del club, Ha sido una gozada trabajar con él”, desliza.