Grietas en el nuevo sistema

La primera respuesta de Carlo Ancelotti tras el triunfo del Real Madrid en la quinta jornada de Liga ante la Real Sociedad no fue de jolgorio, sino de aviso: “Tenemos que evaluarlo, pero es verdad que hemos empezado encajando en tres de cinco jornadas. Remontamos, pero tenemos que evitarlo, luego te cuesta entrar en el partido y hay que esforzarse más”. Posteriormente, volvió a incidir en ello, respondiendo a otra pregunta que versaba de un asunto diferente: “Tenemos muchas opciones para marcar, lo sabemos, lo que tenemos que evitar, y también lo sabemos, es encajar al principio, empezar perdiendo”.

Era evidente que el italiano, pese a la victoria y a que el Madrid mantiene el pleno de triunfos (cinco de cinco) que le hace líder en solitario, no había quedado satisfecho del todo. Las virtudes ofensivas del Madrid quedaron bien expuestas ante la Real: el equipo blanco remató 17 veces en total, 8 a puerta, intervino 32 veces en el área rival y puso hasta 21 centros al área (córneres incluidos). Pero no es menos cierto que fue un equipo de cierta endeblez defensiva, especialmente en la primera parte: le remataron 15 veces, 5 a puerta, y permitió 17 intervenciones de la Real en su área.

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El Madrid ha encajado tres goles en estas cinco jornadas, con sólo dos porterías a cero. Y paradójicamente, es el equipo menos goleado del campeonato en estos momentos. Aunque ha concedido ocasiones para recibir algún tanto más: según los datos de Opta, los goles en contra esperables al Real Madrid han sido en estas cinco jornadas 5,01, muy por encima de otros equipos como Athletic (3,42) o Atleti (3,52, aunque con un partido menos). Lunin (ocho paradas en nueve tiros a puerta) y Kepa (nueve paradas en once disparos) han tenido trabajo y han evitado una herida mayor.

Lo que más preocupa a Ancelotti es el momento en que han llegado esos tres goles, siempre al inicio de los partidos, siempre obligando a otra remontada más en la oficina: ante el Almería, Arribas anotó en el 3′; contra el Getafe, lo hizo Mayoral en el 11′; y la Real puso el 0-1 el pasado domingo en el 5′. Además está pagando sobremanera el Madrid la ley del ex, pues tanto Arribas como Mayoral se formaron en la cantera blanca y el tanto de la Real, de Barrenechea, llegó tras una jugada personal y centro de Kubo, otro que fue blanco por momentos.

El Barça se protege mejor que el Madrid

La norma se viene repitiendo: el Madrid sale dormido, encaja y luego pega el arreón debido para remontar. Y lo hace, porque el nuevo sistema en rombo, ideado para acercar lo máximo posible a Bellingham a posiciones de remate, ofrece múltiples alternativas ofensivas. Pero también se descubre excesivamente en defensa, sobre todo en los laterales. El duelo ante la Real fue la prueba perfecta: Valverde acompañó por la derecha a Carvajal y tomó el lugar del carrilero en varios momentos, ayudando siempre para que no se enfrentase a un dos contra uno. Kroos, en el flanco izquierdo, no hizo lo propio y dejó a Fran García a merced de la genialidad de Kubo, apoyado por Traoré. Así sufrió como sufrió en la primera parte el canterano blanco. El sistema exige interiores de gran sacrificio o por ahí pueden llegar los disgustos.

Los números defensivos blancos ya dejan señales preocupantes: es el undécimo de 20 en tiros recibidos en Liga y el noveno en disparos a puerta; el Barcelona, su gran rival por el título, se ha manejado bastante mejor en ese aspecto (cuarto y segundo en dichas estadísticas, respectivamente). Aunque hay una estadística en la que el Madrid es primero y ve al resto por el retrovisor: la de puntos. Nadie ha sumado los 15 y por eso los blancos lideran la tabla, aunque Ancelotti ya manda avisos para corregir los desajustes en defensa, consciente de que antes del próximo parón viene curvas: este domingo visita al Atleti en el Metropolitano y el martes 3 de octubre, al campeón de Italia, el Nápoles, en el Diego Armando Maradona.