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BARCELONA

Gavi, de principio a fin

Xavi personificó la remontada contra el Celta en el andaluz, que en la jugada del 3-2 robó el balón en su córner y terminó dando la asistencia a Cancelo. “Es brillante en las dos facetas, defensiva y ofensiva”.

Actualizado a
Gavi se besa el escudo y celebra un gol en el partido contra el Amberes.
JOSEP LAGOAFP

Cuando João Cancelo marcó el 3-2 contra el Celta, João Félix no sintió la necesidad de ir hacia su compatriota, con el que ha desembarcado en Barcelona después de un verano complicado para ambos. João se fue a abrazar a Gavi. Sabía por qué lo hacía. En el minuto 89 de partido, y aunque había salido cerca del descanso, el andaluz había ido hasta su propio córner para recuperar un balón. Allí, cerca del banderín, consiguió su objetivo, le pasó el balón a Koundé y se fue hacia arriba, dejándose el aire que le quedaba. Suficiente como para tener la brillantez necesaria para ver la irrupción de Cancelo en el área. El resto es historia.

Gavi, en el encuentor ante el Celta.
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Gavi, en el encuentor ante el Celta.PAU BARRENAAFP

“Si hay que personalizar en alguien la remontada, ese es Gavi”, dijo Xavi al final del partido. El corazón del andaluz engancha a cualquiera. “Me pone muy difícil sacarlo del campo”, había dicho ya el día del Betis el entrenador del Barça. Y el día que entró en las rotaciones, lo estaba echando de menos. Gavi es un jugador de una naturaleza especial. Nada más aparecer contra el Celta, vio una tarjeta amarilla después de una pérdida de balón evitable. Poco después, siempre al límite, hizo una entrada fuerte. Muchos temieron por su expulsión. También, porque le hiciera penalti a Bamba al principio de la segunda parte después de que el marfileño le desbordase. Pero Gavi fue reponiéndose y ganando peso en el partido. Colocado en el doble pivote, terminó haciéndose el dueño del partido y, sobre todo, empujando hasta el final. “Es muy completo. Puede ser brillante en las dos facetas, ofensiva y defensiva. Es el alma, la pasión, el corazón. Y que sume pases de gol y goles a esos registros, pues es bueno porque un jugador del Barça los debe apostar”.

El internacional, que el curso pasado firmó tres goles y siete asistencias (memorable su final de la Supercopa de España en Riad contra el Madrid), lleva ya dos goles y una asistencia esta temporada; y ha tardado menos de un mes en poner las cosas en su sitio después del runrún de la pretemporada en la que era colocado por algunos expertos como eslabón débil de la cadena y posible quinto centrocampista por detrás de Gündogan, De Jong, Pedri y hasta Oriol Romeu. El fútbol habla por sí mismo y si el Barça no es Gavi y diez más, le falta poco. “Un corazón con patas”, como dice Gavi. Un líder con 19 años recién cumplidos.