Fortea ya posa de blanco
El canterano que deja el Atlético para firmar por el Real Madrid ya luce los colores madridistas. “Muy feliz con este nuevo reto. ¡Hala Madrid!”, ha escrito en Instagram.
Un juvenil rompió la tregua; la ‘paz’ entre Real Madrid y Atlético. Jesús Fortea (Albal, 15 años), tras tres temporadas creciendo en Alcalá y defendiendo los colores rojiblancos, ya posa como nuevo jugador del Real Madrid. Un cambio de bando que ha escenificado en su propia cuenta de Instagram, sonriendo con la elástica madridista y escribiendo un escueto mensaje: “Muy feliz con este nuevo reto. ¡Hala Madrid”. Fortea es uno de los siete canteranos del Atlético de Madrid que, según contó la Cadena SER, se han ofrecido al Madrid en las últimas semanas. El primero en firmar; quién sabe si no el último.
Durante muchos años, los vecinos de la capital han mantenido un ‘pacto de no agresión’, jamás escrito, a través del cual prometían no sólo no ‘robarse’ jugadores de ninguna categoría (desde el primer equipo hasta las más inferiores), sino ni siquiera ojearlos. Mantenerse completamente al margen y no encender mechas mayores. Pero todo eso ha cambiado recientemente; el fichaje de Fortea ha sido la chispa que ha prendido una relación que atraviesa, ahora, su peor momento. Este giro de 180º sorprende, sobre todo, porque la relación entre Miguel Ángel Gil Marín y José Ángel Sánchez es buena.
El trasvase de jugadores puede que no haya hecho más que empezar. Porque, además, hay un detalle muy importante: en España los menores de 16 años no pueden firmar un vínculo laboral con ningún equipo. De forma que ‘pescar’ en las canteras se vuelve accesible, no habiendo más obstáculos que el convencer al futbolista de manera verbal. Fortea, lateral derecho de 15 años, estaba en esa situación: nada le ataba al Atleti legalmente, más que su voluntad de jugar allí. Pero esto ha cambiado: ha sido él quien ha elegido el Madrid. Y ya posa de blanco.
Otros casos
En los últimos años todos los movimientos han sido consensuados entre ambas partes. Con transparencia y negociaciones abiertas. Uno de los ejemplos más sonados fue el de Agüero, pretendido por el Madrid el verano de 2011: el propio Gil Marín pidió a Florentino que, en pro de la paz social, frenase su interés... y lo hizo. El Kun acabó saliendo al City por 40 millones. Otros casos fueron Theo Hernández, por el que hubo un acuerdo que contentó a ambas partes (tenía una cláusula de 24 millones y el Madrid, para suavizar la operación, se estiró ofreciendo 30; 28 fijos y dos en variables ‘muy asequibles’); y Marcos Llorente, otro ejemplo de que con acuerdos de por medio, no había problemas: el Atleti pagó 40 ‘kilos’.