Experiencia internacional y en la élite al servicio de Pacheta
Los fichajes de Sergio Asenjo, Sergio Escudero y Zou Feddal por el Real Valladolid cuentan con varias similitudes relacionadas con su currículum.
El Real Valladolid contabiliza a estas alturas del mercado siete fichajes, de los cuales cuatro son caras nuevas: Sergio Asenjo, Sergio Escudero, Zou Feddal y Mickael Malsa. De ellos, los tres primeros se ajustan a un mismo retrato robot, distinto al de los adquiridos Monchu, Plata, Iván Sánchez y el mencionado Malsa. Nacidos en 1989 los tres, todos están habituados a la élite, en la que el central marroquí, el último en llegar, es quien menos lleva: nueve años.
Feddal totaliza 170 partidos entre la Primera División española, la Serie A italiana y la Primeira Liga portuguesa, Escudero volvió a Valladolid con 206 apariciones entre la Bundesliga y la Liga Santander y Sergio Asenjo retorno con 298 envites, a los que, como el de Santovenia de Pisuerga, ha sumado dos más, llegando a los 300 frente al Sevilla en el Sánchez-Pizjuán. Son los más experimentados, junto a Roque Mesa, que inicio este curso con 174 encuentros entre Premier y Liga.
Asimismo, con los tres, el Real Valladolid ha adquirido a futbolistas que han disputado competición europea, por lo que conocen el fútbol de máximas exigencias, después de haber ganado títulos, como tres Europa Leagues el cancerbero y dos el lateral o una liga portuguesa el central. Junto a ello, tanto Asenjo y Feddal han sido internacionales, algo que Escudero estuvo a punto de ser en 2016, cuando llegó a ser convocado por Lopetegui, pero no llegó a debutar.
En este sentido, Pacheta dispone a día de hoy de siete futbolistas que han jugado con las absolutas de sus países, dado que también lo han hecho El Yamiq y Anuar con Marruecos, Malsa con Martinica, Plata con Ecuador y Weissman con Israel. De todos ellos, Feddal es el único que sabe lo que es disputar una fase final de una competición internacional, algo que querrá repetir en el Mundial, en el que querrá estar presente, como su compatriota El Yamiq y el ecuatoriano Plata.