“Eterno segundón no, seamos una amenaza real para el Barça”
Los pequeños accionistas del Espanyol proponen un plan estratégico a tres años vista para abandonar la anomalía que Barcelona presenta en fútbol entre las capitales europeas.
Consumado el ascenso, y ante un panorama que “si se enroca la propiedad, más pronto que tarde se convertirá en una situación similar a la del Valencia, quizá una guerra civil”, la asociación que agrupa a los pequeños accionistas del Espanyol, APMAE, expuso este miércoles por la tarde en las Cotxeres de Sants, Barcelona, su posicionamiento ante el modelo actual del club, propiedad del conglomerado chino Rastar en un 99,7% por ciento.
“Uno de los problemas de los últimos años ha sido el conformismo, la falta de ambición. Es una lástima que habiendo invertido 200 millones en el Espanyol, estemos así. Lo ha gestionado mal, por eso ahora pretende recuperarlo”, se arrancó Carlos Bosch, presidente de una APMAE que aglutina ese 0,3% restante del capital social perico, formado por más de 8.000 pequeños accionistas. “El objetivo el próximo año es la permanencia, creo que todos los pericos somos conscientes, porque no somos un equipo ascensor. Pero no es incompatible con ser ganadores, ambiciosos”, proclamó.
A modo de asamblea extraordinaria, propuso el vocal de la APMAE David Andrés un plan estratégico para el Espanyol, vehiculado ante el 125º aniversario “del único club fundador de las Ligas masculina y femenina”, el próximo año. “Nos hemos salvado de una buena con el ascenso pero en el club nadie piensa en crecer. Nosotros sí creemos que estamos ante una oportunidad histórica y debemos cambiar de chip”, exclamó Andrés, que pasó a la acción.
La diferencia con Manchester, Milán y Madrid
“En ninguna capital europea con dos clubes sucede lo que en Barcelona con Espanyol y Barça. Tenemos potencial, al margen de condicionantes mediáticos y sociales, para que el Espanyol se convierta en un club que haga la competencia al Barça y que pueda ser como mínimo lo que es un Atlético de Madrid o un Milán. No queremos ser el eterno segundón, sino una amenaza real para un club como el Barça”, sentenció, aportando ejemplos: City y United facturan lo mismo, Inter y Milán están en un 55-45%, Real Madrid y Atlético, en un 66-33%, mientras que Barcelona y Espanyol comparten una proporción del 85 y el 15%.
“Tenemos una ventana de oportunidad porque el Barça se encuentra en una situación económica muy complicada y no tiene ahora mismo estadio. Esta fragilidad contrasta con nuestro ascenso y con el 125 aniversario. Estas dos temporadas próximas debemos experimentar una transformación para en la 2026-27 suponer una opción para la gente a la que en Barcelona le gusta el fútbol”, abundó.
Inversores, carnets baratos y patrocinadores “rebeldes”
En tal discurso medió uno de los presentes, el miembro de la plataforma Ambición Perica Alejandro López Fonta, quien reflexionó: “En los años 70 estábamos cerca del Barça. Ahora, muy lejos. Chen se ha equivocado mucho pero no es el único culpable. Estamos donde estamos por las decisiones que hemos tomado todos durante la historia del club”. Y añadió: “Vamos a creer en lo que podemos hacer, y vamos a unirnos. Barcelona es la única ciudad del mundo donde hay una diferencia tan abismal entre dos clubes igual de antiguos”.
Ese “cambio de paradigma a todos los niveles” pasaría por inversores externos que “ayuden” a los gestores actuales, una campaña de renovación de abonos “agresiva, para facilitar que la gente vaya al estadio, que sea barato”. También “buscar patrocinadores que no sean compartidos con el Barça, sino que acepten el relato del Espanyol, de rebeldía”. Y apostar decididamente por la cantera.
Otro ‘challenger’ llamado Girona
En definitiva, el objetivo consistiría en triplicar dentro de tres temporadas la facturación de la 2022-23, así como aumentar en un 50 por ciento la asistencia al estadio y el número de abonados. “Estas ideas debemos aplicarlas con urgencias, porque existe otro ‘challenger’ cerca, que es el Girona”, culminó Andrés.
En la línea de buscar ese “Espanyol ganador y ambicioso”, enumeró Bosch tres peticiones públicas que eleva a la propiedad actual del Espanyol: “Queremos una Junta Extraordinaria de Accionistas ahora que empieza la temporada, para saber qué modelo presentará Rastar, con los números al cierre de las cuentas; también una ampliación de capital agresiva, no sólo para cubrir deuda (apuntaría a los 75 millones como cifra idónea); y pedimos un refuerzo de la estructura directiva, con consejeros independientes y expandiendo el área corporativa”, zanjó.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.