“Es un buen momento para que el Getafe sorprenda al Madrid”

Es un humanista del fútbol. Pocos pueden tener la visión panorámica que posee David Belenguer (Vilasar de Mar, Barcelona, 1972). Defensa elegante con 500 partidos de élite en su hoja de servicios, estratega dentro y fuera del campo, ha sido capitán del Getafe, CEO de un holding futbolístico chino, presidente del Tondela portugués, entrenador UEFA Pro, director deportivo, emprendedor, asesor de grandes compañías y completó un máster en Administración y Dirección de Empresas. Actualmente asesora al Toluca mexicano. Su vida es un viaje continuo y un aprendizaje sin fin. Pasó por la cantera del Real Madrid, se consagró en el Betis y alcanzó su cénit en el Getafe, donde se convirtió en icono azulón. Atiende a AS recién aterrizado de Doha y a pocas de subirse a otro avión rumbo a Lyon.

-¿Es más estresante su vida ahora que cuando era jugador?

-No. Es verdad que viajo mucho, pero la presión no es la misma. Mucha gente piensa que sólo eres jugador las dos o tres horas que pasas en el club, pero es una profesión que requiere una dedicación completa de 24 horas, saber asumir la responsabilidad y gestionar situaciones complicadas. Ser jugador es más estresante de lo que parece, sobre todo en el aspecto mental.

-Como profesional, ¿su mejor etapa fue en el Getafe?

-En el Extremadura estuve muy bien, me fichó el Betis y ahí rendí a un nivel muy alto hasta que me rompí el tendón de Aquiles. Eso me frenó la progresión porque estuve casi año y medio parado. Al Getafe llegué con 32 años y estuve siete temporadas y media. Al principio me costó, pero luego me sentí muy a gusto y creo que tuve un rendimiento óptimo.

-¿Por qué eligió la corbata en vez del chándal?

-Fue un poco casualidad. Muchos compañeros me veían como futuro entrenador, pero yo no lo tenía tan claro. Me gustaba manejar las situaciones como jugador y capitán, pero como entrenador intuía que iba a ser muy diferente. Charlando un día con Manolo Sanchís me dijo que estaba metido en temas de formación y gestión y me dio un empujón para elegir esa vía. No fue algo premeditado, ni mucho menos.

-¿Quién le parece mejor gestor: Florentino o Tebas?

-Uff. Son muy diferentes. Creo que cada uno es un referente en lo suyo. La mentalidad de Tebas no valdría para el Real Madrid y la de Florentino tampoco para LaLiga. Son perfectos para el perfil que representa cada uno.

-Buen regate. Y eso que usted era central…

-Es lo que pienso realmente.

-¿Nadal sería un buen presidente del Madrid?

-No veo fácil que eso ocurra. Mi sensación es que eso es poco probable. La gestión deportiva requiere a veces decisiones empresariales duras que contrastan con la pureza deportiva y humana de Nadal y su perfección en cuanto a valores. Es admirable la humildad con la que ha manejado su inmensa grandeza. Para mí es una debilidad. A todos nos gustaría educar a nuestros hijos para que fueran parecidos a Rafa. No lo veo presidiendo el Madrid, no me lo imagino.

-¿Y a Piqué mandando en el Barcelona?

-Eso es más factible, pero con Gerard nunca se sabe. Me lo encuentro mucho en mis viajes por el mundo y hemos hecho cosas juntos en cuanto a negocios. Tiene muchos conocimientos de empresa y es brillante como emprendedor. Pudiendo vivir de lujo sin hacer nada tiene la inquietud de jugarse su prestigio y su dinero en aventuras empresariales.

-Desde su experiencia, ¿lo de Mbappé es un bloqueo mental?

-Su caso me parece calcado a la llegada de Zidane al Madrid. En sus primeros meses recibió muchas críticas porque no conseguía alcanzar su nivel habitual. Su rol ha cambiado y debe adaptarse. En el PSG era la estrella absoluta y en el Madrid tiene que compartir protagonismo. Además, él está acostumbrado a un fútbol más vertical y menos táctico y no juega en su posición habitual, en la que más ha rendido siempre.

-¿Cuál es la receta para salir del laberinto?

-Paciencia. Necesita un poco más de tiempo, pero logrará triunfar porque la calidad no la ha perdido. Es un futbolista superlativo con un talento descomunal y sus virtudes le harán destacar. Además, los jugadores no son robots y tienen picos de rendimiento. Es cierto que el Madrid exige inmediatez en el rendimiento, pero cuando todas las piezas encajen veremos de nuevo la mejor versión de Mbappé.

-¿El escenario es propicio para que el Getafe sorprenda?

-Sí, porque los equipos grandes no están acostumbrados a perder y les cuesta salir de las rachas negativas. Lo estamos viendo con el City. Escapar de una dinámica negativa les cuesta porque no están habituados a esas situaciones y les genera más estrés. Es un buen momento para meterles mano.

-Usted fue protagonista en la única victoria azulona en el Bernabéu…

-Fue en 2008 y ganamos 0-1 por una circunstancia curiosa. Marcó gol Robben en el minuto 20 de la segunda parte, pero era fuera de juego. Casi todos los jugadores del Madrid se fueron a celebrarlo sin darse cuenta de la indicación del árbitro. Yo saqué rápido para montar el contragolpe, Casquero salió a la carrera y acabó marcando Uche. Mijatovic me quería matar (risas).

-¿Qué le está pareciendo Raúl Asencio?

-Lo está haciendo muy bien. Por desgracia estas oportunidades sólo surgen de la necesidad, como es el caso del Madrid ahora. Está demostrando personalidad y garra. Es un defensa con alma de defensa, que no es tan fácil de encontrar y eso es oro puro, sobre todo en un equipo ofensivo como el Madrid. Ahora llega lo complicado, que es mantenerse y asentarse. Debe estar tranquilo, sin ponerle mucha presión y darle continuidad.

-¿Pondría a Tchouameni o a Asencio junto a Rüdiger?

-A Asencio, sin ninguna duda. Una reconversión de centrocampista a central puede salir bien en un par de partidos, pero a medio plazo es una mala decisión. La de central es una posición muy específica y requiere unas características muy especiales. Como parche puede valer, pero no como solución.

-¿Debería fichar el Madrid?

-Desde fuera no es fácil opinar porque nos falta información. El cuerpo técnico del Madrid tiene datos suficientes para saber indicar las necesidades a la dirección deportiva. Opinar como aficionado es fácil, pero hay que tomar decisiones profesionales.

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-¿Qué bajas notará más el Madrid?

-La de Carvajal, por liderazgo, y la de Camavinga, por cuestiones tácticas. Con la retirada de Kroos y el descenso lógico en el rendimiento físico de Modric, la presencia del francés es crucial para dar equilibrio al centro del campo. Lo de Carvajal se explica por sí solo debido a su jerarquía, su alma y su corazón.

-No me ha dicho Vinicius…

-Es que su ausencia es más fácil de cubrir, aunque sea un jugador impresionante y haga jugadas estratosféricas. Rodrygo o Mbappé pueden jugar en su sitio y también son estrellas.

-¿La RFEF necesita una regeneración?

-Desde hace mucho tiempo y no sólo en la figura del presidente sino en los estatutos. Las Federaciones Territoriales tienen unos intereses alejados de lo que necesita el fútbol español en general. No puede ser que el presidente sea elegido por los mismos que decidían hace treinta años. Hace falta una regeneración completa y variar el sistema de elección.

-Usted conoce como pocos el fútbol chino ¿ve lejos que un jugador de allí triunfe en Europa?

-Sí. La crisis del fútbol chino ahora es importante. Ha habido muchos casos graves de corrupción, detenciones de dirigentes, desaparición de clubs y una gran inestabilidad. Eso ha tenido un impacto en la formación, que necesita trabajo y continuidad. La situación requiere casi empezar de cero. Hay muchos problemas y es muy difícil que desarrollen una cultura futbolística como la nuestra y que salgan jugadores de élite.

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