El Valencia juega la Supercopa en el césped y en los tribunales
El club de Mestalla mantiene litigio con la RFEF por la edición de 2020, en la que se opuso al cambio de formato y a un “reparto económico desigual y arbitrario”
El Valencia aterrizó el lunes en Riad para disputar su segunda Supercopa de España desde el cambio de formato de 2020, una edición por la que el club de Mestalla mantiene un litigio en los tribunales contra la Real Federación Española de Fútbol. Así, el Valencia se enfrentará, otra vez, al Real Madrid en una semifinal de la Supercopa mientras sigue jugando ‘otro’ partido en los juzgados. De hecho, según fuentes del Valencia, el contrato de esta edición de 2023 lo ha firmado reservándose derechos de reclamación como hiciera en 2020.
El Valencia acudió a la edición de 2020 como vigente campeón de Copa del Rey. El club de Mestalla se opuso en su momento tanto al cambio de formato como al reparto económico que entendía “desigual” y “arbitrario”. El Valencia protestó ante el Consejo Superior de Deportes y finalmente compitió, aunque firmando “no conforme” en varios de los puntos del contrato que le presentó la RFEF.
El club de Mestalla, entonces gestionado por Mateu Alemany, actual Director de Fútbol del Barcelona, inició los trámites para presentar su demanda. Por diferentes situaciones (pandemia, litigio previo para determinar qué juzgado debería juzgar el caso, varios requerimientos a la RFEF para presentar documentación…), la demanda no se presentó hasta octubre de 2022 y el pasado mes de diciembre fue admitida a trámite. El Valencia pide daños y perjuicios partiendo de la base del valor de mercado de la competición,: 40 millones de euros.
El Valencia percibe de mínimo el doble que el Betis, que acude como Campeón de Copa
En este sentido, cabe recordar, según datos hechos públicos por el club, al Valencia le correspondían en la edición de 2020 un mínimo de 2,5 millones (de los que tras iniciar los trámites para la demanda solo habría percibido 800.000). En la presente edición, el Valencia por participar cobrará 1,7 millones (más del doble que el Betis, 750.000, aún siendo este campeón de Copa). Desde el club de Mestalla, en este sentido, se apunta que la empresa Kosmos percibe según se ha publicado en diferentes medios de comunicación 4 millones de euros, una cifra a la que el Valencia solo se acercaría si gana el título (un millón por ser finalista, otro más por ser campeón). Los servicios jurídicos del Real Betis y el Athletic de Bilbao -finalista en la pasada edición- están también a la expectativa del transcurrir de la demanda blanquinegra por si su suman a ella.
“Hace unos días tuvimos la constancia que se había admitido a trámite la demanda que empezamos a trabajar en 2020 cuando el club se dio cuenta de que el reparto económico, sin entrar a valorar que se celebre fuera de España y que puede perjudicar a nuestros aficionados, se produjo de manera opaca, sin transparencia, sin la participación de los equipos involucrados. Ha costado mucho tener acceso a la documentación para fundamentar la demanda. Pero los juzgados llevan la velocidad que llevan. Se ha admitido a trámite, llamará a la otra parte y llevará sus pasos”, apostilló Javier Solís, director corporativo del Valencia. “Vamos a participar en la próxima edición, pero seguimos con la misma cuestión. Hemos pedido más transparencia, pero no ha llegado por su parte: nos veremos en la obligación de volver a firmar el documento reservando los derechos que nos interesen”, sentenció.