El Valencia busca una salida a Paulista
Lim no quiere que el central pueda llegar a cumplir los 20 partidos con los que renovaría automáticamente su contrato. Actualmente suma 16.
El Valencia tiene tres días para encontrar una salida a Gabriel Paulista con la que resolver de la forma menos traumática su entuerto. Peter Lim no quiere que el central pueda llegar a cumplir los 20 partidos con los que renovaría automáticamente su contrato, cuyo salario bruto supera los 5 millones anuales, y así lo ha transmitido. Paulista suma 16 partidos jugados y está a cuatro de cumplir los requisitos para ampliar su vinculación (20 partidos de Liga en los que haya participado un mínimo de 45 minutos) y la ventana de enero está abierta para cerrar el caso sin que llegue a salpicar en las decisiones del cuerpo técnico.
El Valencia, desde hace unas semanas, está atento al mercado europeo de centrales con miras a presentarle antes del cierre una propuesta de rescisión a Paulista. Son varios los clubes con capacidad económica que buscan reforzarse con un central y el nombre de Paulista está en las carpetas de sus direcciones deportivas porque ha sido ofrecido. La intención es presentarle al propio jugador alternativas para una salida inmediata a un club que le asegure un contrato más allá de junio. Paulista tendrá la última palabra, como la tuvo en septiembre cuando rechazó una propuesta de Arabia Saudí, aunque tanto él como Baraja van a saber que Lim no quiere que renueve por el alto porcentaje de coste de plantilla que implicaría su continuidad el curso que viene.
Paulista, una vez se baje la persiana del mercado, quedaría a solo cuatro partidos de su renovación automática cuando restan 16 jornadas de Liga. El contexto, en este sentido, ha jugado a favor del central brasileño, cuyo rendimiento en general está siendo correcto y a su lado Mosquera está creciendo. La presencia de Diakhaby en la Copa África con la selección de Guinea le ha ‘eliminado’ del vestuario al único central con opciones reales de discutirle el puesto a criterio del cuerpo técnico. De ahí que, durante la ausencia de Diakhaby, que mínimo se prolongará una jornada más, Paulista ha sumado cuatro partidos más a su casillero (Villarreal, Cádiz, Athletic y Atlético).
Baraja, la última vez que habló sobre la situación de Paulista, fue menos contundente que cuando en octubre la SER desveló la cláusula que tiene el central en su contrato para su renovación automática. Entonces dijo: “Es mi faceta y el club no tiene que entrar para nada porque no lo entendería (…) yo no me entrometo en otras facetas del club (…) yo solo veo el rendimiento inmediato y trato de ser justo”. Sin embargo, el pasado 13 de enero, aún remarcando que “nosotros solo pensamos en el próximo partido”, apostilló: “Es una situación que se tiene que definir, pero la valoración solo se puede hacer con el paso del tiempo”. Y los partidos que va sumando el brasileño hacen que ese tiempo esté cercano, si bien, una salida esta semana de Paulista -con el riesgo deportivo a corto plazo que implicaría- evitaría que esa “situación” se pudiera “definir” por un ordeno y mando de Lim, como ya sucedió hace un par de temporadas con Guedes y Bordalás.
El jugador, por su parte, valoraría que el club le hiciera una propuesta a la baja para continuar y dar carpetazo a la cláusula de los 20 partidos. Sin embargo, esta opción el club no la contempla ya que en el ámbito puramente deportivo se confía plenamente en Mosquera y Yarek, al que se quiere promocionar a partir del curso que viene; y se está muy pendiente de Tárrega, tras su cesión al Valladolid. Además, Cenk fue adquirido este verano por cinco millones y tiene un contrato largo. En esta ventana, se había planteado la posibilidad de que saliera el turco como cedido y crear espacio para un extremo. Las ofertas que han llegado no le han convencido y al poder hacerse lo de Peter por el traspaso de Koba, la cosa se ha enfriado.