El umbral del segundo año
En este siglo, la mitad de los equipos equipos no superan los dos años tras el ascenso a Primera. La UD dio el paso más duro, el primero. ¿Cómo influye el cambio de técnico?
El Sevilla anunciaba esta mañana que su técnico de la próxima campaña sería García Pimienta. Mientras tanto, los amarillos esperan cerrar durante los próximos días la contratación de su próximo técnico. El sustituto de un histórico, —ascenso y noveno en número de partidos— y que siguió un paso similar al de Kresic tras el ascenso del año y posterior salvación de principios de siglo.
Desde aquel curso 1999-2000, se determinó que bajarían a Segunda tres y el mismo número subiría a la élite. Sustituyendo el sistema previo de dos plazas fijas más unas eliminatorias entre equipos de Primera y Segunda, como la que disputó, y perdió, Las Palmas allá por 1998. Pues bien, en total desde el nuevo formato han sido 72 los equipos que han caído a la categoría de plata. Y 71 los que han subido, a falta de dilucidar el tercero que saldrá de los Eibar, Espanyol, Sporting y Oviedo.
Es por ello que la estancia media de los equipos desde aquella primera temporada 1999-2000 es de 4,3 campañas de estancia en la élite. Los que más han aguantado: Sevilla, 23 campañas y Atlético de Madrid, 22. Los que menos, obviamente, Las Palmas y Alavés. De toda la Primera División, solo Real Madrid, Barcelona, Athletic y Valencia no han pisado la Segunda en este siglo XXI.
Como si de una carrera intentando superar el río Mara, la mitad de los equipos no consiguen superar los dos primeros años en la máxima categoría tras su ascenso. Veinticuatro han regresado el primer año hasta el momento —uno por temporada— y once el segundo —uno cada dos campeonatos. Si acaso Las Palmas y Alavés han superado el primer paso, el que las estadísticas determinan como más complejo. Ahora queda el segundo. El mismo que se encasquilló en el año 2002 con Fernando Vázquez en los banquillos pero que superó con solvencia en 2017 con Quique Setién.
Siguiendo la pista de los entrenadores en total han sido trece —más esta temporada la U.D.— los equipos que cambiaron el técnico que les ascendió y les mantuvo el primer año en la máxima categoría. De ellos, siete equipos repitieron estancia en Primera la siguiente temporada, como el Atlético de Madrid cuando sustituyó a Luis Aragonés por Gregorio Manzano, o cuando Montanier llegó como recambio de Martín Lasarte. Por tanto, un 58% de los equipos que cambiaron de director de orquesta en el segundo año fueron capaces de mantener la categoría. Y un 42% acabó bajando a la plata.
Este porcentaje de supervivencia sube hasta un 78% cuando el entrenador que firmó el ascenso continúa dirigiendo la segunda campaña consecutiva de sus pupilos en Primera División. Entre estos casos destacables están Caparrós con el Sevilla a principios de siglo o Marcelino en Villarreal.
Por tanto esta temporada se verán ambos casos, quien pudieron continuar con el entrenador que les llevó Primera en el caso de Luis García Plaza en el banquillo del Alavés y quién ha tenido que cambiar como es el de Las Palmas.
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