El regreso de Pinchi

Si acaso el mejor talento maduro que había cedido la U. D. Las Palmas, Pinchi vuelve a Gran Canaria once meses después de su salida hacia el Mirandés. Tras la rescisión de Unai Veiga, anunciada el pasado viernes, se está ante una de las pocas incógnitas que quedan por resolver en la faceta de continuidades con la camiseta amarilla.

De los últimos en pasar reconocimiento médico, Óscar García Pintela, Pinchi, regresa a la disciplina amarilla después de una temporada como expatriado en Miranda de Ebro, donde todas las partes acabaron satisfechas: el jugador porque encontró los minutos que no iba a tener en Gran Canaria, Las Palmas porque evitaba apalancar un activo y el Mirandés porque recibió un talento que le ayudó a mantener otro año la categoría, y con solvencia.

No en vano, a las órdenes de Joseba Etxeberría, hoy técnico del Eibar, el coruñés cuajó una destacada temporada con los rojillos, en la que participó en 38 jornadas de las 42 totales. 33 de ellas, titular y en las que fue capaz de asistir en dos ocasiones y anotar seis tantos, lo que supuso convertirse en el tercer máximo goleador de los castellanos.

Gracias al potenciador de talento en el que se ha transformado el Mirandés en las últimas temporadas, Pinchi ha ganado un cartel en Segunda que le convierten en una de las piezas más apetecibles, además en una gran edad de maduración, 27 años, y encontrándose en su último año de contrato.

Aunque la presunción de una nueva marcha no tiene por qué confirmarse, el caramelo de Primera lo tiene delante de la boca, a una pretemporada de cambiar la opinión de la dirección deportiva y García Pimienta. Por si acaso, ya llegan cantos de sirena de su Galicia natal, como indicaba AS.