El protagonista de la jornada: Abel Bretones, el asturiano que conquista Osasuna
Pese a ser su primer año en Primera División, Moreno confió en él desde el principio y le ha devuelto la confianza con creces. Marcó ante el Barça.
Mientras el Oviedo luchaba la pasada temporada por alcanzar el ascenso a Primera División, en Pamplona ya se hablaba del interés de Osasuna por Abel Bretones, lateral izquierdo entonces del equipo asturiano y que venía realizando una temporada espectacular. En el club rojillo no escondían el interés por el jugador, pero entendían que su equipo todavía estaba compitiendo. Además, no era el navarro el único equipo que había puesto sus ojos en el joven asturiano. El Betis era otro de los interesados en él. El club navarro hizo una primera oferta de dos millones de euros, que el Oviedo rechazó.
Pero la dirección deportiva del club decidió apostar fuerte por él y pese a que era un jugador sin experiencia en Primera, el 5 de julio anunciaban la llegada de Abel Bretones a Osasuna. El club rojillo pagó por el jugador 2, 8 millones de euros y este firmó un contrato por cinco temporadas. Él mismo sabía que no iba a ser fácil, la competencia era dura y por delante, en teoría, estaba Juan Cruz, un jugador con experiencia en Primera. Sin embargo, Vicente Moreno confió desde el principio en él y el 17 de agosto, en la primera jornada de Liga, ate el Leganés, jugó de inicio cumpliendo su sueño de debutar en la máxima categoría del fútbol español. Pocos días después, el 1 de septiembre, con el Celta como rival, marcaba su primer gol con Osasuna y en Primera. Abel, iba cumpliendo sueños.
El sábado pasado, ante el Barcelona, comenzó el partido en el banquillo, pero supo aprovechar, y de que manera, los minutos que le dio el míster. A los pocos minutos de salir y con el encuentro a punto de acabar, engancho un balón y de un zapatazo anotó el cuarto. Otro sueño más cumplido, marcarle al Barça. Desde su llegada ha jugado siete paridos, seis de ellos como titular. Acumula un total de 522 minutos y dos goles.
En cada partido lo da todo y no se limita a defender, sino que muestra atrevimiento y criterio en ataque. La afición rojilla ya corea su nombre y se ha adaptado a la perfección a la disciplina osasunista, además de haber encajado a la perfección en el vestuario, en el que es muy querido por sus compañeros.