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El perfil bajo de Christensen

A sus 26 años, el central, que salió con 15 de casa, es casi un veterano. Llegó generando dudas, pero su rendimiento ha sorprendido para bien. Huye de la exposición pública.

Christensen, en un partido de Champions ante el Inter.
Soccrates ImagesGetty

Andreas Bodtker Christensen se ha convertido, de momento, en uno de los fichajes más valiosos del Barça esta temporada. Su partido en el Metropolitano contra el Atlético y la final de la Supercopa que jugó ante el Real Madrid le confirman como un jugador muy válido para el club azulgrana. “Ya sabíamos que tenía ese nivel y que podía marcar diferencias”, dice de él Xavi, aunque en su mente la pareja titular de centrales tenía que ser Araújo-Koundé según se desprende del mismo documental “A new era”. “Con Koundé ya he hablado yo, está loco por venir, te aporta liderazgo, tiene 23 años... lo que decía ahora Jordi Cruyff. Tú pones a Koundé y a Araújo de centrales y puedes subir al ataque con los dos laterales”. Pero en el baile de la pareja Koundé-Araújo se ha colado Christensen.

A sus 26 años, a Christensen casi se le puede considerar un veterano. Crecido en el Brondby, con apenas 15 años se marchó al Chelsea (firmó en febrero de 2012). Después de acompañar al equipo en una gira por Estados Unidos, su debut oficial con los blues se produjo ya con 18 años, en octubre de 2014. Al curso siguiente, Christensen dio otro paso en su carrera cuando fue cedido al Moenchengladbach, con el que en dos cursos jugó 62 partidos, lo que le permitió regresar hecho al Chelsea, con el que jugó 93 partidos y hasta fue campeón de Europa en Lisboa en la final contra el Manchester City (jugó casi medio tiempo por lesión de Thiago Silva). Christensen, sin embargo, perdió protagonismo paulatinamente en el equipo londinense y, especialmente, se vio señalado por las críticas por algunos errores gruesos. Eso le hizo repensarse el futuro y explorar la vía del Barça.

Considerado el mejor defensa danés del momento, Andreas Christensen es un tipo tranquilo. Aunque tiene cuenta de Instagram, no es activo. Mikkel Nord, director editorial del sitio web bold.dk, destaca de él que “prefiere el silencio y la calma a su alrededor. No hace mucho ruido y prefiera estar centrado en el fútbol”.