El momento de Vinicius
El brasileño, lastrado por las lesiones esta temporada, aun así participa en un gol cada 114 minutos y mantiene la confianza de Ancelotti de cara a la final ante el Barcelona.
Aun en su versión más descafeinada, Vinicius sigue siendo vital para el Madrid. El brasileño fue titular en la semifinal de la Supercopa ante el Atleti y lo volverá a ser mañana ante el Barcelona. Después de dejar atrás su segunda lesión muscular de la campaña, no logra lucir aún su mejor cara, pero Ancelotti le mantiene la fe por encima de momentos individuales (Brahim o Joselu) porque sabe que un destello suyo puede bastar. Así fue ante el Atleti: el 3-3 que mandó el duelo a la prórroga, donde el Madrid dio los dos golpes de gracia, empezó con una arrancada de Vini para plantarse solo ante Oblak; su remate no fue bueno, pero provocó un rechace que, tras dos remates de Bellingham y otro más de Carvajal, terminó dentro de la red.
No contó como gol ni como asistencia, pero sin duda Vinicius tuvo un papel protagonista en la acción clave del duelo, la que mandó a la lona al Atleti. Y pese a que la campaña no marcha por los cauces que el brasileño esperaba, sus números siguen siendo potentes: con seis tantos y cuatro pases de gol en 1.140 minutos, participa en una diana cada 114′, un dato superior, por ejemplo, al de su compatriota Rodrygo (123′), aunque lejos aún de Bellingham (92′), Brahim (92′) o Joselu (94′). Pero no está lejos de sus cifras de las dos últimas temporadas: en la 2021-22 (22 goles y 20 asistencias) participó en una diana cada 102 minutos; y en la 2022-23 (23 goles y 21 asistencias), cada 108′. Un Vinicius a medio gas casi calca su rendimiento de cursos pasados. Sólo le falta ritmo de crucero para igualarlo o superarlo.
Está siendo una temporada atípica para Vinicius en lo relativo a las lesiones. Sobre todo, porque las está teniendo cuando era un jugador con facilidad para esquivarlas: en su primera temporada en el Madrid (2018-19) sufrió una rotura de ligamento de la rodilla que le tuvo fuera casi dos meses, pero en las cuatro campañas siguientes apenas acumuló cinco partidos de baja en total, y fue por una gastroenteritis, por COVID y por unas molestias de rodilla leves. Pero esta temporada la fortuna le ha dado la espalda: ya son once encuentros de baja por dos lesiones musculares. Tras la última sólo ha jugado dos encuentros, pocos para encontrar el punto de finura. Pero mientras llega, Carletto sigue entregado a Vinicius.
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