El mercado se mueve por Fekir
Arabia Saudí vuelve a poner sus ojos en el francés del Betis, que comienza a jugar, a cuentagotas, tras su grave lesión. También existe interés desde Turquía.
Nabil Fekir volvió a sumar minutos con el Betis en la recta final del partido contra el Granada, y de hecho participó en la jugada del gol de la victoria verdiblanca, que anotó Isco. El atacante francés se ha lesionado muscularmente varias veces tras superar su rotura de cruzado, consecuencia lógica para una dolencia de tal calibre, y tardará seguramente algún tiempo más en alcanzar un nivel suficiente para poder rendir como titular. Pellegrini lo sabe, y trata de mimarle para que no recaiga.
Fekir quiere jugar más, evidentemente. Y el mercado se mueve por el futbolista durante esta ventana invernal. Sigue existiendo un vivo interés en Arabia Saudí, donde amenazan con llevarse a otro puñado de estrellas europeas durante las próximas semanas, mientras se reanuda su campeonato. En Turquía también piensan en Nabil: estos días, la Prensa otomana revela que el Galatasaray le quiere como sustituto de Ziyech, que no ha cuajado en la Superliga.
Con Isco precisamente como indiscutible líder ofensivo del equipo bético, Fekir parece abocado a un rol más secundario, al menos de momento. Pero su salario sigue siendo el de una estrella, el que más cobra en la plantilla y hasta junio de 2026 además. El Betis renovó a Nabil en enero de 2022 con la idea de bajar su amortización y, también, de tener la sartén por el mango en la negociación de un hipotético traspaso. Camino de los 31 años y con ese astronómico salario, las posibilidades de pedir mucho dinero por él se han esfumado, pero su marcha liberaría la cantidad suficiente para reforzar alguna o quizá varias de las posiciones que Pellegrini tiene en tenguerengue, con Ayoze Pérez y Aitor Ruibal como últimos inquilinos de la enfermería.
La marcha de Fekir resultaba algo probable para el verano de 2023. La grave lesión que se produjo a finales de febrero abortó cualquier posibilidad de marcha. Nabil siempre se ha declarado muy a gusto en Sevilla, pero si los millones saudíes siguen llamando a la puerta y el jugador no acaba de entrar en las alineaciones, todo puede ocurrir de aquí al 31 de enero.
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