El mediocampo, el epicentro del cambio del Real Valladolid

Este próximo sábado, en Villarreal, Diego Cocca está obligado a formar un centro del campo nuevo, por la sanción de Mario Martín, todavía no oficial pero sí oficiosa, debido a su segunda expulsión del curso, la que vio contra el Real Madrid. En la que será su quinta jornada al frente del Real Valladolid, el entrenador argentino deberá alinear su quinta formación en esta posición, en la que hasta ahora no ha podido encontrar continuidad debido a las bajas que ha tenido y a los avatares del mercado.

Lo que empezó con Juric, Mario Martín e Iván Sánchez en Girona se transformó en un triunvirato conformado por los dos primeros y por Kike Pérez contra el Betis y contra el Espanyol, siendo esta la única opción con visos de repetirse más veces de no ser por el deseo de Kike Pérez de salir, manifestado internamente semanas atrás y que provocó que fuera suplente contra el Real Madrid, contra quien, para más inri, Juric estuvo sancionado, lo que llevó a Amallah y a Anuar a acompañar a Mario Martín.

A la salida del toledano hay que añadir dos anteriores, las de César de la Hoz y Víctor Meseguer, en un proceso de reconstrucción del que formará parte Tamás Nikistcher, quien quizás debute en Villarreal, aunque quizás debiera integrar a algún futbolista más en los días que quedan de mercado por una cuestión numérica, a tenor de los hábitos implementados por Cocca y de las aptitudes o costumbres de los Amallah, Iván Sánchez o Anuar, quienes han venido complementando la parcela desde que el argentino llegó al banquillo del José Zorrilla el pasado mes de diciembre.

No en vano, el técnico siempre ha utilizado a tres futbolistas por dentro, incluyendo a un jugador con un marcado perfil defensivo y a otro similar a este aun cuando la disposición ha tendido a un ‘uno-dos’, y no a un ‘dos-uno’. Esto es; incluso cuando no ha optado por un doble pivote muy marcado en sus alineaciones, siempre uno de los interiores tenía unas condiciones propias de un volante mixto, de un jugador sacrificado que pudiera estar cerca de quien cubriera el rol de destructor.

Para este último, cabe destacar que entre Juric y Nikistcher pueden cubrir la posición, si bien, si no llega nadie más a esta, solo se podría hablar de Mario Martín como una alternativa real, siendo el resto de piezas utilizadas hasta ahora en esas zonas interiores meros complementos. Y no es baladí, aunque la economía apriete, esta circunstancia, teniendo en cuenta que el Real Valladolid combina más por dentro ahora; opta por un juego interior vertical, pero trenzado en zonas que antes apenas exploraba, mejorando las sensaciones ofrecidas por el plantel las últimas jornadas.

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