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REAL MADRID

El Madrid de 2024

Con Endrick cerrado, el club blanco traza las líneas maestras para su equipo del futuro. En 2023, el objetivo es Bellingham. Haaland sigue en el horizonte.

El Madrid de 2024

El Real Madrid del futuro ya tiene sus líneas maestras trazadas. Un plan de acción donde la apuesta por la juventud en el mercado ha ido de la mano de la presencia de tótems. Futbolistas como Carvajal, Casemiro, Modric, Kroos o Benzema que han permitido, y permiten, con su experiencia y conocimiento de la casa blanca, el crecimiento de algunas de las mayores joyas a nivel mundial sin la premura que supone tener que liderar el proyecto. Así han ido eclosionando Valverde, Vinicius o Rodrygo, los tres abanderados de esta transición dulce en la que Ancelotti ha desempeñado, y desempeña, un papel fundamental. Ahora, con Endrick apalabrado, Bellingham como el gran deseado en 2023 y el asterisco que acompaña a un Haaland que sigue en el horizonte, el grupo de jugadores sobre el que se sustentarán los cimientos del nuevo Santiago Bernabéu toma forma.

Para empezar, los que (todavía) no están. Todavía. El Madrid identificó a Jude Bellingham como el sustituto ideal de Luka Modric, tal y como informó AS en el mes de marzo. El centrocampista del Borussia Dortmund es el anhelo del próximo verano, un fichaje en el que habrá que batallar con el Liverpool y que rascarse el bolsillo (desde Alemania se hablan de más de 150 M€). Eso sí, el excelente rendimiento del zurdo de Stourbridge en el Mundial no hace sino refrendar la apuesta como ganadora. A Modric le queda gasolina en el tanque y no se pone límites, de manera que podría hacer de cicerone al jugador destinado a sucederle. No en tipo de fútbol, pero sí en importancia y demarcación. Y si 2023 es Bellingham, 2024 es Endrick y Haaland.

El Madrid de 2024.
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El Madrid de 2024.Diario AS

El brasileño ha elegido al Madrid por delante del resto de postores (PSG, Chelsea y Barça) y, una vez cumpla la mayoría de edad (21 de julio del citado año), seguirá los pasos de Vinicius y Rodrygo. Una operación cerrada en 35 M€ fijos y 25 en variables. En lo referente a Haaland, tocaría convencer al futbolista. La cláusula de 150 M€ que le permite salir del City en 2024 es el clavo al que se aferran en el Paseo de la Castellana. Eso sí, deberían retomar las conversaciones y cruzar los puentes que se tendieron el pasado verano. La cacareada llegada de Mbappé al club blanco y la presencia de un Benzema modo Balón de Oro le hicieron decantarse, sin querer dilatar más la decisión, por la oferta citizen. Tocaría revisitar la negociación, teniendo en cuenta que Karim irá ya camino de los 37 años en ese momento. Endrick y Haaland podrían llegar a colisionar, pues el entorno del ariete de Palmeiras valora que el proyecto favorezca al jovencísimo talento. No obstante, la competencia no solo es innegociable en el Madrid, sino también necesaria.

Un interrogante y mucha certeza

El resto de piezas del puzle ya están en el tablero. Aunque hay un interrogante: Vinicius Tobias. El lateral derecho brasileño de 18 años está despuntando cada vez más en el Castilla, donde Raúl le da vuelo como carrilero. Llegado como efecto colateral de la invasión rusa a Ucrania, el Madrid apalabró su cesión con una opción de compra de 18 M€ que debe decidir si ejecutar a final de curso. Ya llama a la puerta del primer equipo y los cupos no serían problema, de manera que se presenta como una opción de mucho futuro para tomar el relevo de un Carvajal que en 2024 ya tendrá 32 años. Así como podría, al igual que Modric con Bellingham, tomarle bajo el brazo para mostrarle los secretos de la posición. A su lado, en la retaguardia, aparecen Militao (24 años), llamado a ser el mariscal durante años de la zaga, Rüdiger (29) y Alaba (30). El alemán y el austríaco son los más veteranos de esta relación de jugadores, pero sus contratos se extienden en ambos casos hasta 2026, son apuestas recientes y dos futbolistas que acostumbran a tener salud de hierro. Como se da por descontada la presencia de Courtois en portería. A sus 30 años, el muro de Bree está en su mejor momento.

La sala de máquinas se encuentra en pleno proceso de transformación. Aurélien Tchouameni (22 años) se ha encontrado con el disfraz de Casemiro cuando su labor era aprender a su lado y, a pesar de algún titubeo natural, no le está viniendo grande. Tampoco la pesada carga de los 80 M€ desembolsados por su fichaje. Qatar 2022, donde está siendo uno de los más destacados de Francia (según Olocip, el tercero en rendimiento y el futbolista que más participa en el juego de Les Bleus), le ha consolidado a nivel internacional. Contar con Modric y Kroos como escolta, además, le aporta una inestimable tranquilidad que, por ejemplo, echa en falta con Camavinga (20 años). Otra de las vértebras del Madrid del futuro, pero que debe de luchar para quitarse la etiqueta de revulsivo. Especialmente para abrirse hueco en el centro del campo si cristaliza finalmente Bellingham y asumiendo que, cuando los maestros se ausenten, Valverde (24 años), extremo a casi tiempo completo, volverá a su hábitat natural. Y es que, la titularidad del Halcón, sea cual sea la posición, es innegociable y su crecimiento es imparable.

Vini como líder

La mencionada polivalencia de Valverde le coloca no solo como competencia de Camavinga, sino también de un Rodrygo que también es multiposicional. No obstante, sobre el papel, el brasileño tiene más papeletas para abrirse hueco como extremo derecho y no como ‘9′. Y más teniendo en cuenta que el perfil zurdo es propiedad de un Vinicius que ya es top-3 entre los futbolistas más valorados del mundo (compite con Haaland y Mbappé en todos los medidores) y mantiene un rendimiento alcista que le coloca en las quinielas de los próximos Balones de Oro y el líder del Madrid que se viene. En tanto que la posición de delantero centro tiene a Endrick y Haaland como futuribles. Uno cerrado, el otro no. Eso sí, si la llegada del vikingo noruego se complicase, y siempre que Benzema de un paso al lado, El Rayo ha demostrado en las ausencias de Karim que tiene fútbol y gol suficiente para ser el centro del tridente. Las piezas del puzle futuro encajan.