El Madrid, atento a Reece James
El defensa inglés, entre los laterales que más gustan en el club. El Chelsea está obligado a un verano de ventas para cuadrar sus cuentas y evitar sanciones.
El Real Madrid se esfuerza por trasladar el mensaje de que está centrado sólo y únicamente en finalizar la temporada deportiva con éxito, levantando alguno de los dos títulos (Copa y Champions) en los que todavía tiene opciones. No se habla de fichajes, aunque sin duda se trabaja en ellos: Bellingham es la prioridad, pero no la única necesidad. En el club crece la intuición de que es necesario un refuerzo en el lateral derecho para incentivar la competencia entre Carvajal y Lucas Vázquez. Y hay varios nombres sobre la mesa.
Ya desde el curso pasado el Madrid confeccionó una lista de posibles refuerzos en la que figuraban nombres como Cancelo, Foyth, Calabria... y Reece James, el primero de la relación y el favorito del cuerpo técnico. El carrilero del Chelsea, de apenas 23 años, gusta mucho en las oficinas de Valdebebas, pero en el Madrid saben que sacarlo del club británico es una tarea complicada. El Chelsea no acostumbra a vender salvo que no le quede más remedio; ya se vio en los casos de Courtois y Hazard, traspasados (y no a precio de ganga) cuando les quedaba un año de contrato y se negaban a renovar, conscientes de que el Madrid estaba detrás de ellos.
Reece James renovó el pasado septiembre de 2022 con el Chelsea y extendió su contrato hasta 2028; por tanto, jugar con una potencial salida gratuita no está en el menú. Pero hay otra baza con la que sí puede contar el Madrid si decide lanzarse del todo a por el británico: el Chelsea necesita vender el próximo verano para cuadrar sus cuentas. Y James es uno de sus jugadores más cotizados. El club cambió de propietario el verano pasado, forzado por las sanciones del Gobierno del Reino Unido a Roman Abramovic por sus conexiones con Putin y con la invasión rusa de Ucrania de fondo, y aterrizó Todd Boehly, que ya poseía porcentajes de la propiedad de otras grandes entidades deportivas, como Los Angeles Lakers (NBA) o Los Angeles Dodgers de béisbol.
Boehly cambió a la mínima que pudo el banquillo (cesó a Tuchel para firmar a Graham Potter) e invirtió un dineral en fichajes, entre el verano y el invierno: Enzo Fernández (120 millones), Fofana (80), Mudryk (70), Cucurella (65), Sterling (56), Badiashile (38), Koulibaly (38), Mudeke (35), Malo Gusto (30)... Pero en el club londinense ya saben que el verano que viene deberán realizar ventas de cierta importancia para cumplir con los requisitos económicos de la Premier y de la UEFA: acaba de hacer oficiales las cuentas del curso 2021-22, el último bajo la propiedad de Roman Abramovic, con unas pérdidas de 140 millones de euros. Y ya venía de haber perdido más de 170 millones en la campaña 2020-21, en la que fue campeón de Europa.
Havertz, otro que se pone a tiro
El control económico de la Premier especifica que se pueden acumular como máximo pérdidas de 120 millones de euros sumando las tres últimas temporadas. El Chelsea está en posición casi segura de incurrir en una infracción de dicha norma, algo por lo que la Premier ya ha abierto expediente al Everton, con una posible pérdida de puntos encima de la mesa. De ahí que ya se especule con las operaciones que el Chelsea va a tener que hacer en verano; Mason Mount es el nombre que más suena, pero podría no ser el único: Reece James es el segundo jugador con más valor en Transfermarkt del Chelsea, con 70 millones, sólo por detrás de Enzo Fernández (80). Y lo peor son las prisas: necesitaría hacer las operaciones antes del 30 de junio para que computasen en las cuentas de esta temporada y así evitar las potenciales sanciones.
Y de esta necesidad extrema de generar ingresos con la venta de futbolistas se puede aprovechar el Madrid para intentar pescar un nuevo lateral derecho de primer nivel con el que potenciar su plantilla para la próxima década. Incluso, podría plantearse ir más allá: hay otros jugadores interesantes en el equipo londinense, como Kai Havertz, por el que ya negoció el Madrid cuando aún jugaba en el Bayer Leverkusen, pero la pandemia de COVID-19 lo frenó todo. Pero el principal interés blanco en Stamford Bridge se llama Reece James y las circunstancias pueden poner su fichaje mucho más a tiro de lo que cabría esperarse.
Para colmo, ambos clubes van a verse las caras en los cuartos de final de la Champions League y será la oportunidad para que Florentino Pérez y José Ángel Sánchez conozcan a la nueva dirección del Chelsea. Con la anterior las relaciones eran buenas, especialmente con la mano derecha de Abramovich en el club, la también rusa Marina Granovskaia; habrá que ver cómo es el nuevo equipo de Todd Boehly y si se abre a una negociación para la cual, le guste o no, está obligado.