El indestructible Álex Suárez
En su debut en Primera División acabó siendo, como tantas veces, indiscutible para Las Palmas. Las pruebas de su hombro derecho descartan algo grave.
“Nunca puso una mala cara”, dijo alguna vez García Pimienta, su ya exentrenador, de Álex Suárez. El próximo responsable del banquillo del Sevilla se refería, claro, a sus primeros meses de trabajo en Las Palmas, aquella temporada que acabó con el equipo grancanario en la lona por los golpes del Tenerife en los playoff. Pimienta llegó en enero y apenas jugó en tres partidos con él.
Al 4 de Las Palmas no parecía afectarle, en su labor diaria, la falta de confianza en él. “Entrena como un animal”, insisten a Diario AS desde el entorno del futbolista. Nunca desfalleció y acabó siendo un jugador imprescindible, lo mismo da como central, su posición natural, que como lateral derecho, donde pasó de ser un parche a un recurso de mucha valía. En la temporada del ascenso se hartó de jugar: 40 partidos, 3.055 minutos.
La cabezonería de Suárez y la definitiva apuesta de Pimienta por él los acabó uniendo en un cálido, emocionado y sincero abrazo, sobre el césped de un Estadio de Gran Canaria ya totalmente vacío, el pasado domingo, un buen rato después de cerrar la temporada contra el Alavés. Ambos como protagonistas de una poética imagen. No había testigos más allá de las familias de ambos y algún que otro jugador. Cada uno, por su lado, pisó el verde para inmortalizarse con sus seres queridos. También entre ellos como muestra de un respeto que parece quedar para siempre.
En la temporada recién finalizada volvió a emerger Álex Suárez como un defensa colosal, no importa que le tocara un roto o un descosido, acaso indestructible por más problemas físicos que pudiera tener o competencia sufrir. Si en el puesto de central debía ‘pelearse’ con Mármol, Coco o Eric Curbelo, en la banda derecha le esperaban Álvaro Lemos, Marvin Park o Julián Araujo.
Sea como fuere, Suárez aprovechó sus momentos para ganarse el puesto como el que más. Tanto fue así que acabó su temporada de debut en Primera siendo, con 2.566, el sexto jugador de Las Palmas en minutos, apenas superado por Valles (3.264), Kirian (3.216), Mármol (3.181), Sergi Cardona (2.816) y Javi Muñoz (2.646). Fue, además, 30 veces titular en los 32 partidos que jugó y marcó dos goles, el que abrió la lata de la agónica y lejanísima victoria contra el Valencia (2-0), la última de la temporada para su tropa, y el 1-1 del duelo ante el Betis que acabó 2-2
Físicamente se volvió a comportar como el portento que es. En el partido que cerró el campeonato se llevó un duro golpe contra el corpachón de Álvaro Valles en la sana intención de ambos de despejar un balón. Un choque que, a la mayoría, le hubiera salido bastante más caro que a Suárez. Salió magullado de aquella acción y, de hecho, acabó siendo sustituido por Loiodice. Las pruebas médicas que se hizo esta semana no detectaron algo importante. “Tiene un esguince en el hombro derecho pero no es nada, se ve algo muy leve”, confirma a Diario AS un conocedor de las mismas. Así, al alba de julio, será uno más junto al resto de sus compañero. Y es que nada puede con el indestructible Álex Suárez.
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