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Barcelona |

El factor Camp Nou

El Barça puede liquidar LaLiga en su estadio antes de mudarse temporalmente a Montjuïc. La media de asistencia este curso es de 83.362 espectadores, 30.000 más que el curso pasado.

Actualizado a
Panorámica del Camp Nou en el Barça-Wolfsburgo de semifinales de Champions femenina.
David RamosDiarioAS

Con cinco puntos de ventaja sobre el Real Madrid y toda la segunda vuelta por jugar, el Barça ya es consciente, teniendo en cuenta los estadios que ha visitado ya de que el factor Camp Nou tendrá un alto porcentaje de importancia en la carrera por la Liga. Por el templo azulgrana, que cuando acabe la Liga cerrará temporalmente, tienen que pasar aún, por ese orden, Sevilla, Cádiz, Valencia, Real Madrid, Girona, Atlético, Betis, Osasuna, Real Sociedad y Mallorca. Al Barça le tocará intentar calcar en casa lo que ha hecho fuera durante la primera vuelta.

Pese a tener ya una parte de la tercera gradería en obras, el Camp Nou, por tanto, tendrá que jugar su papel. Lo ha pedido Xavi muchas veces ya desde que es técnico del Barça y los números le avalan. La asistencia este año ha subido en 30.000 espectadores con respecto a la del año pasado. En la temporada 2021-22, la asistencia media en LaLiga fue de 53.982 espectadores. Este curso ha subido espectacularmente hasta los 83.362.

La entrada más baja esta temporada en el Camp Nou en Liga ha sido de 73.261 espectadores. La más alta, en el derbi ante el Espanyol, fue de 92.605 espectadores.

No es una temporada más en Can Barça. En verano, el club formalizará su traslado de una temporada a la montaña mágica de Montjuïc, un recinto con apenas 59.000 localidades de capacidad, de los que sólo 45.000 asientos podrán ser utilizados por abonados. Los otros 14.000 se utilizarán para venta de entradas, equipo visitante y compromisos. Admitiendo que hay unos 82.000 abonados, la presencia deberá ser rotatoria. Muchos aprovecharán para hacer uso de su asiento esta temporada en un Camp Nou que puede jugar un rol determinante de aquí a final de temporada y que, además, vuelve a divertirse con su equipo o, al menos, empieza a verlo ganar.