El Elche de la temporada 22-23 tiene el peor puntaje del siglo XXI
Es el equipo que menos puntos ha sumado en Liga, a estas alturas de campeonato, en el nuevo siglo. Ha encajado 45 goles, el segundo que más de entre las cinco grandes ligas.
Si antes del partido ante el Espanyol la salvación ya se contemplaba en amplios sectores de la afición del Elche como una quimera, la derrota del pasado domingo acaba con el mínimo remanso de esperanza que pudiese quedar. El descenso no es matemático, pero la sensación de desahucio es total. De haber ganado, los de Machín se habrían puesto a nueve puntos de un Espanyol en horas bajas. Un mundo para un equipo que tan solo había sido capaz de ganar un encuentro en lo que iba de curso, pero un clavo ardiendo al que tratar de agarrarse, al fin y al cabo. Tras la derrota, queda, con nueve puntos, a 13 de la permanencia, a falta de tan solo 16 partidos y 48 puntos por disputarse. En lo que va de siglo, ningún equipo había obtenido un puntaje tan bajo en la jornada 22 del campeonato.
La situación del equipo es dramática, y lo ha sido desde el inicio. En 21 de las 22 jornadas disputadas, el Elche ha ocupado los puestos de descenso. Su primera victoria del curso llegó en la jornada 20 (3-1 ante el Villarreal) y encadena 17 partidos como colista de la categoría, algo que, vistos los más de diez puntos que le separan del Getafe, no parece que vaya a cambiar a corto plazo. Y es que las estadísticas explican lo que dice la clasificación. El elenco franjiverde, con 45 goles en contra, es el que más encaja de LaLiga, y el segundo más goleado de entre las cinco grandes ligas europeas, por detrás del Angers (47). Algo razonable si atendemos al registro de disparos recibidos en la competición doméstica, que encabeza con 340.
Falto de gol
No obstante, también le ha lastrado la parcela ofensiva. En este último apartado, la crisis goleadora de su delantero insignia, Lucas Boyé, ha hecho mella. Los siete tantos en 24 partidos que anotó el argentino el pasado curso se han visto reducidos a tan solo uno en 20 encuentros. Boyé es, según Olocip, el segundo peor jugador del equipo en cuanto a valor aportado, y de los 0,35 goles que promediaba en la 21-22, ha pasado a registrar 0,06. Su bajón de rendimiento llama la atención por lo acentuado del mismo. El 9 franjiverde llegó incluso a ir convocado con la Selección Argentina hace menos de un año (el pasado 26 de marzo) para disputar un partido contra Venezuela, correspondiente a las Eliminatorias Sudamericanas. Hoy no queda rastro de ese acierto goleador que complementaba con una inteligencia táctica que siempre ha tenido.
Los números aportan poca esperanza al futuro del Elche de aquí a lo que resta de temporada. Sin embargo, la plantilla con la que Francisco arrancó el curso no hacía prever un descalabro de tales dimensiones. El club mantuvo en verano la columna vertebral con la que el año anterior finalizó decimotercero, y consiguió mantener a jugadores como el propio Boyé, Omar Mascarell o Pere Milla, además de sumar a otros como Roger Martí, Álex Collado o Pol Lirola. Pero nada parece haber salido como se esperaba. “Nos vamos contrariados porque poco más se puede hacer para ganar”, comentó Machín en la rueda de prensa posterior a la derrota ante el Espanyol. Ni siquiera en partidos donde el equipo ha competido y ha merecido más, como el del pasado domingo, ha sido capaz de sacar resultados positivos, por lo que se ve abocado a un difícil y largo tramo final de la temporada.