El descubridor de Mosquera: “Está agradecido al Valencia y será fiel”
Jorge Ferrández entrenó al central en sus inicios en el Hércules. El técnico cuenta a AS cómo encontró al último vagón de la ‘Quinta del Pipo’.
Cristhian Mosquera (Alicante, 2004) se doctoró ante el Atlético. El central cuajó un gran partido en Mestalla. La apuesta de Rubén Baraja por otro joven volvió a salir bien. Mosquera cumplió con nota y ahora quiere aferrarse a ese rendimiento para no perder el puesto en el eje de la defensa del Valencia. Mosquera mostró madurez ante el Atlético, esa que horneó durante su etapa en el Hércules. El central, alicantino de nacimiento, se pasó cinco temporadas en el club blanquiazul. Jorge Ferrández, su entrenador durante cuatro cursos en Alicante, vio antes que nadie sus virtudes. Le reclutó para el Hércules y fue testigo directo de un “chico especial” en todos los sentidos. Ferrández, en la entidad del Rico Pérez desde 2009, analiza en AS cómo fueron los inicios del Mosquera futbolista. Con 12 años, se marchó a Paterna.
¿Dónde vio por primera vez a Mosquera?
Fue en su primer año de prebenjamín, con el Carolinas. Yo estaba en el Hércules y nos enfrentamos al Carolinas, en el Monte Tossal, y pronto me pregunté: ¿Quién es ese nene? Hablé con los padres y cuando terminó la temporada, le incorporamos al Hércules. Tenía siete años.
¿Qué le llamó la atención?
Vi a un jugador con unas condiciones físicas para la edad muy por encima de la media, con grandes condiciones atléticas. Además, tenía una base técnica que me llamó la atención, con sólo seis años.
¿Siempre fue tan alto?
Sí, siempre fue bastante más alto de lo que le correspondía por edad en todas sus etapas. Como anécdota, me tocó hablar con sus padres desde el primer día para decirles que se trajeran siempre el DNI porque en infinidad de partidos y torneos nos hacían entregar el DNI porque pensaban que era un niño de edad superior. No sólo era por la altura, sino también porque futbolísticamente era muy bueno y generaba dudas en los coordinadores de otros equipos.
¿Jugó siempre de defensa?
De central y lateral derecho. Era muy rápido, con una zancada muy grande y queríamos potenciarlo. Partía desde abajo pero tenía libertad para incorporarse. El campo de fútbol 8 se le quedó pequeño muy pronto.
¿También conoce a su hermano?
Claro. Yulian también jugó en el Hércules y está en el Infantil A del Valencia. A Yulian le pasaba como a Cristhian, siempre estaba físicamente por encima del resto. En el Hércules, jugaba con niños un año mayores. Yulian tiene toda la pinta de seguir los pasos de su hermano. Bromeo con sus padres con que van a coger el testigo de los Williams y les digo que los Mosquera ya están aquí (risas).
¿Qué tipo de niño era Cristhian?
Siempre fue un jugador y un niño muy especial en todos los sentidos. Era maduro, responsable y educado, aunque le tratases con siete años. Además, su entorno familiar le ha favorecido mucho porque nunca han ido con alardes ni se ponían nerviosos. Cristhian sacaba buenas notas. Era bastante líder dentro del vestuario y muy responsable y tranquilo. Un diez tanto dentro y fuera del campo.
“Era un niño maduro, responsable y educado. Su entorno familiar le ha favorecido mucho”
Ahora es fácil decirlo, ¿pero pensó que llegaría al fútbol profesional?
Desde que lo vi aquel día, con seis años, jugando con el Carolinas se le veía algo especial y no se dejó de ver en todas las etapas. Insisto, era un nene muy bien dotado técnicamente y físicamente, además de tener una cabeza bien amueblada y un gran entorno. Al final, ha cumplido metas y está cumpliendo sus sueños. Por lo especial que ha sido siempre, seguirá cumpliendo objetivos.
¿Cómo recuerda aquel día en el que el Valencia llama a su puerta?
Antes de marcharse, había rumores porque Cristhian era un niño que destacaba mucho. El Valencia y el Villarreal se interesaron por él. Llegó un día en el que el padre me llamó y me trasladó que el interés del Valencia era real. Tuvimos una reunión en el club y me dijeron que la opción del Valencia la veían muy interesante. Nosotros no íbamos a frenarle. Pensamos en darle toda la confianza para que diese el paso. Los padres siempre tuvieron claro que mientras no hubiese nada en firme no saldría del Hércules. El Valencia se llevó el gato al agua porque fue el que más apostó por él. El club ché tuvo la idea más firme y el proyecto más serio.
Pone rumbo a Paterna con 12 años. ¿Le consta que le costara aclimatarse por salir tan pequeño de Alicante?
Dentro de esa dificultad, le ayudó mucho su responsabilidad y madurez, además de ese núcleo familiar tan cercano que tiene. Seguro que pasó momentos malos, pero no fue traumático para él. Siempre tuvo claro su camino y se centró en el objetivo para que todo fuese más fácil.
¿A quién idolatraba Mosquera?
Era un niño reservado, de conversación corta, pero muy educado. Más que tener un ídolo, yo y muchos le llamábamos Varane porque le veíamos unas características similares a cuando el francés triunfó en el Madrid. Cristhian se reía con su típica sonrisa cuando se lo decíamos. Muchas veces se lo decía al padre y me decía que el propio Chirstian se fijaba en en él.
“Muchos le llamábamos Varane y su padre me dijo que se fijaba en él”
Ahora todo son piropos, pero hay que ser valiente para apostar por él como ha hecho Baraja...
Me encantó que Baraja le pusiese contra el Atlético. El ‘Pipo’ demostró que es valiente y que apuesta de verdad por la cantera. El curso pasado, Mosquera ya estuvo en dinámica de primer equipo, aunque le costó. Es complicado porque un central tiene más responsabilidad y sólo tenía 18 años. Me consta que este verano le transmitieron esa confianza para quedarse en el Valencia y ahora Baraja lo ha demostrado. Pero estoy convencido de Cristhian va a responder a esa confianza porque no ha terminado su desarrollo futbolístico. Tiene capacidad para jugar en la elite. Si Baraja sigue apostando por él, seguro que triunfa.
Tiene un perfil muy Premier. ¿Le ve allí?
Es cierto que tiene ese perfil. Pero Cristhian es un chico fiel y se siente agradecido al Valencia por las oportunidades que le han dado. Pienso que seguirá en el Valencia mientras considere que puede crecer y conseguir objetivos a este nivel, pero insisto en que tiene ese punto de fidelidad hacia quien le ha querido y arropado. Luego, podrán pasar mil cosas y salir del club. Pero ahora mismo, en el Valencia se siente bien, respaldado y con confianza. El propio Baraja le convenció para que se quedara.