El césped del Bernabéu, problema sin fin: quinto cambio del curso
Ante el Celta volvió a mostrar un aspecto pobre y el Real Madrid lo sustituirá para que llegue al duelo ante el City en las mejores condiciones. Cada cambio cuesta unos 300.000 euros.
Las declaraciones de Xavi en Getafe el pasado fin de semana a cuenta del césped del Coliseum Alfonso Pérez centraron debates buena parte de la semana que hoy concluye (luz solar aparte). Ninguna sorpresa, el exmedio culé siempre se ha distinguido por su defensa de un verde exquisito que potencie el juego por bajo. Y esas condiciones son las que han reinado en el Santiago Bernabéu desde hace años; hasta esta temporada, en la que la hierba del coliseo blanco está ocupando casi tanto en la actividad del Real Madrid como la planificación de la plantilla que viene. Y de momento, no ficha el club un césped a la altura.
Ante el Celta, regresó una imagen demasiado repetida esta campaña: la de un verde quebradizo y seco, que terminó completamente levantado tras la finalización del partido y que en absoluto ayudó al buen desempeño del fútbol de ataque. Así lo notaron Vinicius, Benzema y Asensio (“Está muy mal, sabía que tenía que asegurar y le pegué hacia abajo”, explicó el balear en relación a la acción del 1-0) en sus arrancadas; también los jugadores del Celta, como Aspas, que se quejó del mismo tras un remate mordido en posición ideal para acortar diferencias.
“Es evidente que la obra afecta...”
El Bernabéu se distinguió durante la última década por ser una alfombra, obra del que fuese Jefe de Jardineros del Real Madrid, el inglés Paul Burguess, que desempeñó esa labor durante 12 años hasta que, en 2021, decidió cambiar de proyecto (ahora trabaja en el Chelsea). Heredó el puesto José María Fernández Muñoz con sobresaliente durante el curso 2021-22; pero este curso el césped del Bernabéu va de suspenso en suspenso: ya se ha cambiado cuatro veces (con dos orígenes: Arévalo, en Ávila, y el Parque Nacional de Monfragüe, en Cáceres) y será sustituido una quinta vez, con vistas a la visita del City.
El polvo de las obras, deslizan en el club, es el causante de estos cambios, que suponen un gasto de unos 300.000 € cada vez. Ancelotti, qué remedio, se lo toma con filosofía: “Es evidente que la obra afecta, se sabía. Lo han cambiado de manera periódica y lo van a seguir haciendo. Esa es la idea”.