El ‘caso Diarra’ agita el mercado de España: “Es la hora de atacar las cláusulas abusivas”

La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) ha querido dar luz al nuevo escenario que se va a encontrar el fútbol tras la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea en el Caso Lass Diarra. Un gran elenco de especialistas deportivos sobre cómo puede afectar en el mercado fichajes. Entre los ponentes hay discrepancias entre si esta resolución judicial va a suponer una revolución o no, pero sí coinciden en que se debe apostar por la protección de los jugadores.

Con la sentencia del caso Lass Diarra se teme que los jugadores puedan romper su contrato unilateralmente sin tener que pagar una indemnización. Lo que podría llevar a los clubes a dejar de invertir en fichajes. En ese punto es donde se centrarán las negociaciones de todos los actores del fútbol. ¿Cuál deberá ser la indemnización que se deba pagar si un jugador o un club rompen de manera unilateral un contrato? FIFA negocia con todos los implicados un acuerdo, aunque Emilio García Silvero, director legal de FIFA, ha anunciado que implantarán medidas transitorias para el próximo mercado de invierno.

Escenario internacional

La sentencia Lass Diarra ha creado un debate dentro del derecho deportivo. Expertos como Juan de Dios Crespo apunta a que “no es una revolución, es una normalización”. Mientras que Lucien W. Valloni, presidente de la asociación de jugadores de Suiza, señala: “Para mí esta sentencia tiene un gran impacto y mucho calado. Matusalén rompió su contrato, cobraba apenas unos miles y le condenaron a pagar 11 millones. Esto no tiene sentido. El Tribunal de la UE ha dicho que tiene que ser proporcional. Ambos deben acordar pagando la misma cantidad. Se debe acordar con antelación, debe ser predecible y proporcional. Hacen falta cambios en el reglamento de la FIFA. La esclavitud está abolida, no puedes obligar a nadie a trabajar, pero si tienes que pagar 11 millones no te puedes ir... Es desproporcional”.

“Esta sentencia, que es muy importante, abre la posibilidad de reconfigurar parte del sistema de transferencias. Los jugadores son libres de romper su contrato, pero sometidos a las consecuencias financieras que se deben establecer. Ahí estará la piedra filosofal de la disputa. Lo que queda claro es que debemos poner en marcha una nueva configuración respecto al cálculo”, apuntó García Silvero.

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España y su problema con las cláusulas

Aunque FIFA ahora deberá afrontar un cambio de legislación, los expertos apuntan a que a España no le afectará tanto. El motivo son las cláusulas de rescisión, el importe que pactan jugador y club a la hora de firmar el contrato y que en los últimos años muchas oscilan entre los 500 y 1.000 millones de euros. Cantidades que deben asumir el club comprador en caso de querer hacerse con un jugador o este en caso de romper el contrato para quedar libre.

Rodrigo García, socio de Laffer Abogados, explica la complejidad de este asunto: “En España nos da igual el artículo 17 de la FIFA. Es así de triste. Tenemos un grave problema por la mala aplicación de la llamada cláusula de rescisión en el Real Decreto 1006. Se establecen automáticamente cláusulas abusivas y fuera de mercado. Hay ejemplos en los que hemos puesto ante el juez que un jugador tardaría en pagar 250 años si rompe el contrato”. Y añade: “No hay ningún jugador en España que rompa unilateralmente el contrato, salvo que esté mal asesorado. En la práctica se anula posibilidad de que un jugador cambie de trabajo rompiendo su contrato. Es muy grave”. Emilio García Silvero, director legal de la FIFA, añadió: “El artículo 16 del RDL 1006 es más gravoso que el artículo 17.2 de la FIFA”.

Ante esta situación, Rodrigo García apunta a que debe haber igualdad en cuanto a las indemnizaciones cuando es un jugador o un club quien rompe el acuerdo: “Es el momento de atacar y se puede conseguir una proporcionalidad. Hay que trasladar a España esa proporcionalidad. En España hay una responsabilidad subsidiaria y que nadie puede destruir. Ningún club extranjero es capaz de hacerse cargo. No quieres meterte en un pleito de 500 millones de euros ante un juez que no sabe de derecho deportivo”.

En esa línea, el abogado español apuntó a que los futbolistas se encuentran desprotegidos: “La legislación deportiva es un cajón desastre que siempre termina perjudicando al jugador. La especificidad del deporte se usa para proteger a los clubes. No sé porqué se ha permitido. Los artistas de esto son los jugadores y están desprotegidos. FIFA debería ser imparcial y no tener una actitud de protección a los clubes. ECA está muy organizada y estarán pensando todos cómo protegen su chiringuito. Los jugadores están muy desprotegidos. Ahora lo que se quiere es minimizar daños…”. Ante esta situación, lanzó una pregunta: “¿LaLiga va a estar abierta a analizar las consecuencias del caso Lass Diarra? Esa especificidad del Deporte no puede servir solo para proteger a los clubes”. Algo que encontró respuesta en María José López, codirectora de los servicios jurídicos de AFE: “Hay materia en la que salen huyendo”.

Sobre la posibilidad de cambiar la legislación española apuntó Rodrigo García: “Cambiar una Ley es muy complicado. El deporte también está un poco abandonado y si cuando lo hacen es un poco demagógico. La ley en sí no es mala, pero si se puede demostrar que hay un uso fraudulento de ella. Se puede atacar eso. Es demostrable que hay un uso torticero de esas cláusulas. Estas en sí no son malas, son deseables, pero debería establecer unos baremos en función de la antigüedad, rendimiento, participación, edad… Prefiero que pongan el valor de Transfermarkt. Es así de triste. En Francia están prohibidas las cláusulas y en el fondo un jugador lo tiene imposible romper el contrato. En España hasta que se pagó 222 millones por Neymar había algunas medianamente razonables”. Mientras que Juan de Dios Crespo añadió: “Yo creo que con esta sentencia las cláusulas van a ir a más”.

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