Frenazo. El Atlético cayó frente al Elche y recordó al de la primera vuelta. Al principio del partido estuvo sin intensidad, fuera de sitio y de lugar, como si no hubiera nada en juego. Una pena porque el equipo había mostrado muy buen nivel en los últimos encuentros. Pero jugando así es complicado que puedas ganar. El Atlético volvió a las andadas y no pudo hacer ni un gol ante un equipo que ya estaba descendido. Un equipo, por cierto, que completó un muy buen partido. Tiró de orgullo. El Elche ha perdido la categoría, pero eso no significa que sus futbolistas no sepan jugar al fútbol. El conjunto ilicitano puso más, mucho más, corrió, se entregó y contó con la fortuna necesaria que necesitan estos equipos para ganar a los grandes. Total, el Atleti vuelve a ser el Atleti, capaz de ganar a los mejores y perder contra los, en teoría, más débiles. En la primera vuelta ya perdió ante el Cádiz y el Mallorca y ahora en Elche. Mientras, ganó o sacó puntos de estadios donde es muy difícil hacerlo. Puro Atleti.
Sin faltas. El Atlético no hizo en el primer tiempo ni una falta. Una muestra de cómo se tomaron los rojiblancos el encuentro. Puedes perder, pero dejándolo todo. Luego, tras el descanso, el equipo de Simeone sí quiso ir a por los tres puntos, pero no tuvo claridad ante el área rival. Se cortó una buena racha de resultados y el Real Madrid se pone, de nuevo, por delante del Atlético. Poco le duró la alegría al equipo madrileño.
El árbitro. No hay que cargar las tintas contra el colegiado, pero Muñoz Ruiz no vio un penalti claro sobre Giménez. Y tampoco estuvo muy afortunado en la jugada del gol del Elche, donde no vio una falta sobre Koke. En esa acción tampoco estuvo muy bien Grbic, quien erró en el balón aéreo. Parece mentira que pueda suceder eso con un portero de tanta envergadura. Grbic va a jugar los encuentros que restan de temporada y necesita hacerlo bien de cara a ganar confianza para la próxima temporada.
Afición. Una lástima porque hasta Elche se desplazaron 650 seguidores desde Madrid. El club vendió todas las entradas que tenía a su disposición y en esta ocasión no pudieron festejar el triunfo. La hinchada nunca falla. Los del Cholo sí lo hicieron. Este próximo domingo será el Día del Niño y el equipo tiene que mostrar otra cara.
Accidente. Habrá que ver si lo que sucedió ante el Elche es un mero accidente o si el equipo se atasca de nuevo. Al conjunto rojiblanco le falta un punto para entrar en Champions y nadie duda de que lo hará. Pero hay que terminar la temporada de la mejor manera posible. Pocos jugadores se salvaron de la quema y si antes se elogiaba el buen juego, ahora hay que reconocer que no se hizo un buen encuentro. La semana fue muy rara, entre lesiones, futbolistas que se entrenaron y luego tuvieron trabajo específicio y acabó como podía acabar. Con derrota y sin orgullo