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ATLÉTICO DE MADRID

El Atlético recurrirá la segunda amarilla a Morata

El punta salió expulsado de Pamplona. En la acción recibe un pisotón del Chimi Ávila, que vio la roja directa. Se entiende que es un jugador muy castigado.

El Atlético intentará que Álvaro Morata pueda participar en el partido del domingo contra el Cádiz. El delantero salió expulsado de Pamplona tras ver dos amarillas en apenas un minuto. La primera, tras golpear con el brazo en el pecho al Chimi Ávila en el juego de espaldas. “Lanzar el brazo hacia atrás impactando en un rival de forma temeraria”, señala el acta arbitral.

Ahí comenzó un rifirrafe, ya que el jugador del Atlético reclamaba las excesivas quejas del argentino y que se llevase la mano a la cara, donde no le había impactado. En la jugada siguiente, nueva polémica. Morata forcejea con Iker Muñoz, que cae al suelo. En la acción posterior el Chimi Ávila pisa la tibia del jugador rojiblanco. Martínez Munuera decretó la roja directa para el jugador de Osasuna por “pisar a un adversario con uso de fuerza excesiva estando el balón a distancia de ser jugado”.

Pero también mostró la segunda amarilla a Morata por “golpear de forma temeraria a un adversario en la disputa del balón”. El Atlético recurrirá ante el Comité de Competición esa segunda cartulina amarilla al entender que Morata no golpea al jugador de Osasuna, simplemente forcejea con el cuerpo, y es él quien recibe una agresión castigada con la roja directa. Al existir el contacto con Iker Muñoz, será Competición quién decide si se le retira la tarjeta o prima la opinión del árbitro. Hay que tener en cuenta que Correa y Memphis se encuentran lesionados, por lo que Griezmann quedaría como el único delantero de la primera plantilla disponible ante el Cádiz salvo recuperación milagrosa del argentino.

Jugador muy castigado

Dentro del seno del Atlético se percibe que Morata es un jugador muy castigado en el juego de espaldas y hay mucha permisividad arbitral cuando recibe contacto físico. En el partido contra Osasuna encajó agarrones, rodillazos a la altura de la espalda y acabó saliendo expulsado por dos acciones donde trata de zafarse con el cuerpo. Simeone ha remarcado en varias ocasiones la cantidad de golpes que recibe su delantero, donde en muchas ocasiones acaba viendo la amarilla por protestar.

A la hora de proteger a los jugadores, se entiende que no hay el mismo rasero hacia el delantero y capitán de la Selección que por otros futbolistas. Gil Marín ya protestó la temporada pasada tras el partido de Copa del Rey contra el Real Madrid. “Creo que a quien no se protegió anoche fue a Griezmann o a Morata, por ejemplo, que les frieron a patadas, pero así es el sistema”, afirmaba el consejero delegado rojiblanco.