El Atlético acaba LaLiga indignado: “Creíamos que lo habíamos visto todo...”
El equipo rojiblanco pierde la segunda plaza en el 93′. Mandi paró un gol de Griezmann con la mano y no se pitó penalti. Puede haber falta a Morata en el tanto de Pascual definitivo.
El Atlético cierra un curso largo... y de indignación arbitral. El equipo rojiblanco perdió la segunda plaza por un gol de Pascual en el minuto 93 precedido de una acción donde Morata pedía falta por un rodillazo de Pau Torres en la espalda. No es la primera vez que el delantero se queja del trato arbitral que sufre cada vez que es arrollado por un defensa. También Witsel lamentó su roja directa indicando que previamente había tocado el balón, aunque después golpea a Lo Celso cuando se marchaba mano a mano.
Sin embargo, lo que más ha indignado al club rojiblanco es el penalti no pitado por una evidente mano de Mandi y que hubiese supuesto su expulsión en la primera mitad. Saúl había rematado de cabeza, Jorgensen repelía la primera intentona y Griezmann recogía el balón para rematar a puerta. Era gol... hasta que se cruzó la mano del central argelino. Pese a que repetición tras repetición la mano era evidente, De Burgos Bengoetxea no la consideró tal y desde el VAR tampoco le corrigieron. El colegiado hizo señas de que el brazo estaba apoyado, aunque no era así. Iturralde, árbitro de Cadena SER y de As, explicaba en Carrusel Deportivo que “no es penalti de Mandi. El balón pega en la mano que va a apoyar en el suelo”.
El Atlético protestó en redes sociales: “Cuando creíamos que lo habíamos visto todo, en la última jornada… Sin palabras”, escribía en su cuenta oficial. No es la primera vez que lo hace este curso. Ya en el derbi de Copa contra el Real Madrid recurrió a sus redes y representantes oficiales para protestar. El Atlético acaba LaLiga como el equipo con menos penaltis en la competición, únicamente uno convertido por Carrasco ante el Cádiz. Y ha sido el segundo club con más goles anotados (70), lo que complica la estadística.
Esta temporada se ha visto como el Atlético encajaba un gol con la mano de Sadiq en un partido en Anoeta en el que le anulaban un tanto a Morata por una mano previa de João Félix y otro a Correa por una falta previa... a favor. En los tres derbis contra el Real Madrid acabó con un jugador menos por expulsiones discutibles. La primera a Hermoso después de que Ceballos se dejase caer, en Copa del Rey por una doble amarilla a Savic cuando se le había perdonado previamente la expulsión al propio Ceballos y en Liga en el Santiago Bernabéu por un impacto de Correa en el pecho de Rüdiger. Morata ha sido uno de los jugadores más indignados este curso. Penaltis no pitados contra Getafe y Rayo, la mano de Busquets en el Camp Nou, el gol anulado en San Mamés con mediación del VAR, constantes faltas de espaldas... el madrileño cierra un año donde no ha tenido suerte con los arbitrajes. A Morata nunca le han pitado un penalti en Primera División.