Dos ‘hermanos’ que quieren más
Real Sociedad y Osasuna quieren seguir aspirando a situarse en la zona noble de la tabla. Ambos contraponen miles de historias cruzadas.
La relación entre la Real Sociedad y Osasuna está llena de vidas cruzadas. Realmente, es un símil de lo que es la relación entre gipuzkoanos y navarros. De la buena relación, habría que matizar, para ser más correctos y ajustados a la realidad. Unos llaman a otros ‘meaplayas’, por los pamplonicas que van a los arenales donostiarras, y los otros a los unos ‘robasetas’, por los guipuzcoanos que acuden a los montes vecinos tras los preciados manjares. Pero es todo con cariño, y no va con ironía, no crean. Las relaciones son muy buenas. Y eso se extiende a las aficiones rojillas y txuri-urdin. La visita a Pamplona está marcada en rojo en San Sebastián, y viceversa. Lástima que a LaLiga le haya dado por poner este duelo fraternal un domingo por la noche, porque eso restará afición de Osasuna en las gradas del Reale Arena. Porque sí, éste es un choque entre ‘hermanos’: el hermano gipuzkoano contra el hermano navarro. Así se llaman jocosamente entre sus seguidores (sigue el partido en directo en As.com).
Hay buen rollo, eso es indudable. Pero a partir de ahí viene todo lo demás. Y lo demás es que tanto Osasuna como Real Sociedad quieren seguir mirando hacia arriba. Y eso solo se hace ganando. No hay más. Para lograr la victoria no hay hermanos que valgan. Mikel Merino ya no está, que era el vínculo más fuerte en el vestuario txuri-urdin con Navarra y Osasuna. Pero siguen Remiro, Pacheco y Aihen Muñoz. La pequeña colonia navarrica nunca falta en la Real Sociedad. Y ya no está en el banquillo rojillo Jagoba Arrasate, cuyo fuerte vínculo con los donostiarras es indudable. Antes de marcharse al Mallorca, rompió la histórica sequía de Osasuna en San Sebastián, el primer duelo entre estos peculiares hermanos que perdieron los realistas de los últimos 16 que han jugado. Le dejó un reto muy interesante a Vicente Moreno, que por cierto solo le ha ganado una vez a la Real: nunca en la historia Osasuna ha logrado dos victorias seguidas en la capital guipuzcoana.
Con ese reto encima de la mesa, Osasuna busca seguir aspirando a los puestos cabeceros de la Liga, después de un comienzo más que interesante de la mano de su nuevo entrenador. Perdió en casa contra el Betis y suma dos jornadas sin ganar, por lo que otra derrota en el Reale Arena le haría perder algo de comba con esa zona noble a la que lleva asomado desde el arranque liguero. Y enfrente estará su ‘hermano gipuzkoano’, que lleva años instalado entre la aristocracia del fútbol español, pero al que esta temporada le ha costado arrancar más de lo esperado. La Real de Imanol Alguacil ya carbura y quiere aprovechar la visita de su ‘hermano navarro’ para continuar con su recuperación y seguir escalando posiciones en la clasificación. Está bien haberle dado la vuelta al peligroso bache inicial, pero es insuficiente. Suma dos victorias seguidas desde el último parón y busca la tercera, porque no hay dos sin tres.
Para ello, Imanol recupera a dos piezas indispensables a las que dio descanso en Europa pensando en Osasuna, y porque no merecía la penas arriesgar, para evitar que el remedio fuera peor que la enfermedad. Pero Remiro es vital en la portería de la Real, y Zubeldia es el jefe de la defensa txuri-urdin. Ambos son claves para seguir echando el cerrojo a una portería que sólo ha encajado ocho goles hasta el momento. Y luego volverán algunos de los que descansaron en Belgrado. Sergio Gómez, Sucic tras superar el positivo por coronavirus, Barrenetxea, y sobre todo Oskarsson, el que debe el hombre-gol de esta Real, mientras se mira con cierta envidia a Budimir en Osasuna, un delantero que estuvo en el radar realista cuando cambió Mallorca por Pamplona.
Porque si algo tiene este Osasuna de Vicente Moreno es que va con todo al ataque, como bien atestiguan sus 14 goles. Además, está de vuelta Barja tras la larga lesión y también regresa Muñoz. Rubén García se queda fuera por unas molestias y eso evita que el técnico rojillo tenga por primera vez a todos sus hombres. La asignatura pendiente del equipo y del propio Moreno sigue siendo sumar de tres lejos de Pamplona. Los de Tajonar sucumbieron en Girona (4-0) y Vallecas (3-1) para después arreglar su imagen en Valencia (0-0) y Getafe (1-1). La Real es el tercer peor local en esta Liga, mientras que Osasuna es el tercer visitante más desastroso. Lo de hoy es otra historia. Dos ‘hermanos’ se citan esta noche en el Reale Arena, dos hermanos con ganas de más, dentro de sus diferentes realidades.
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