Dos despegues al ralentí
Un Betis dubitativo busca ganar en casa cuatro meses después ante un Valladolid en tierra de nadie. Vuelve Fekir, amenaza Machís y Borja Iglesias se lo pierde.
Betis y Valladolid quieren confirmar que sus sensaciones son correctas (sigue el partido en directo en AS.com). Los verdiblancos se agarraron de nuevo a la zona europea tras vencer en Almería y los blanquivioletas tomaron aire con dos triunfos y un empate que reflejaron una renovada solidez defensiva. Pellegrini no quiere dudas pese a que las haya. Pretende que su equipo gane en el Villamarín tras cuatro meses sin hacerlo en Liga. Pero Pacheta no quiere ser invitado a ninguna fiesta y su renovado Valladolid tiene argumentos de sobra para conquistar otro escenario de grandeza tras hacerlo en San Sebastián hace dos semanas.
Habrá cromos de peso sobre el césped. Vuelven Fekir, Luiz Felipe y William Carvalho en el Betis. Son nombres que bastan para asustar. El de Borja Iglesias se ausenta por una inoportuna rotura en un dedo de su mano derecha. ¿Willian José o Ayoze? La batalla por suplir al Panda está sobre la mesa. Ya no hay tantas rotaciones en Heliópolis, pero se prevé que los laterales varíen y que Canales siga tomando los mandos desde esa libertad tan difícil de controlar para el enemigo. No está Rodri en escena, diferencial hace una semana, pero el Betis tiene armas para imponer ciertas pinceladas de creatividad sin él. Joaquín espera minutos tras casi exigirlos mientras Pellegrini mantiene la calma de un plan que hasta ahora desilusionó a pocos.
El Valladolid siente que es momento de más. El mercado invernal le entregó regalos valiosos y sus números se dispararon para creer en algo más que en sobrevivir. Tiene a Sergio León de vuelta al estadio que conquistó su corazón. Es un arma ofensiva de gran calibre y cruza los dedos para mantenerse en este once tan triunfal. Espera Cyle Larin, el hombre capaz de aparecer con la película empezada y ser diferencial. Pero en el equipo vallisoletano habrá verticalidad. Mucha. La del recién llegado Machís, que sabe atravesar muros y expandir sus ansias. La de Plata para convertir sus diagonales en arte. Y la magia de Plano adaptada a ese rol que le fabricó Pacheta en su reformado esquema táctico. Heliópolis puede confirmar despegues. Pero quizás sólo para uno.