Diez años del gran triunfo (no deportivo) de Laporta y sus fieles

Hace exactamente diez años, Joan Laporta y sus más fieles vivían pendientes de una decisión judicial que ya había marcado sus vidas y que amenazaba con seguir haciéndolo. Pero el 28 de octubre de 2014 pudieron respirar aliviados y conseguir la que posiblemente sea su mayor victoria no deportiva en su etapa como dirigentes del FC Barcelona. Ese día, el juez Martínez Borrego decidió desestimar la demanda de Acción de Responsabilidad Civil que la directiva del club, en esos momentos presidida por Sandro Rosell, presentó contra el expresidente y 16 miembros de su junta, al que les reclamaban 47,6 millones de euros.

La sentencia fue histórica porque era la primera que se juzgaba una Acción de Responsabilidad Civil en un club de fútbol. En su fallo, el juez acusó a la directiva de ese momento de intentar cargar gastos en sus predecesores depreciando el valor de algunos terrenos y contratos de forma arbitraria y por eso hincharon las pérdidas en la reformulación de las cuentas que hicieron. Así pues, los 79,7 millones de pérdidas que Rosell atribuyó al mandato de Laporta finalmente se quedaron en 4,09 de beneficio, que tampoco eran los que había anunciado el actual presidente.

Después de ese primer fallo, el Barcelona no tuvo más remedio que seguir adelante con el proceso y presentó un recurso a la Audiencia Provincial, que exoneró a Joan Laporta y a su junta directiva de haber causado pérdidas al club durante su mandato (2003-2010). Fue en mayo de 2017 el día en que finalmente el actual presidente del club y los directivos Xavier Sala Martín, Rafa Yuste, Maria Elena Fort y Josep Ignasi Macià, que fueron los que llegaron hasta el final, se sacaron esa pesada losa de encima. Todo este asunto hizo muchísimo daño al club.