Del “directiva, dimisión” al “¡sí, se puede!” en 40 minutos de infarto

Parecía completamente desahuciado el Espanyol cuando, con un 0-3 a favor del Atlético de Madrid, en el minuto 55 la grada del RCDE Stadium entonó por unos segundos al unísono el cántico “directiva, dimisión”. Nadie creía ya en la reacción, la remontada, y menos en las ya remotas probabilidades de permanencia. Pero todo cambió en poco más de media hora, en un giro de 180 grados que puede variar también el destino del club. Con un contundente “¡sí, se puede!” despidió todo el anfiteatro a su equipo, ni siquiera escondido tras los decibelios en los acordes del himno del Espanyol, una vez se había consumado ya el definitivo 3-3.

Hasta el “¡sí, se puede!”, la zona de animación había comandado, la mayoría sin encontrar un apoyo mayoritario en otros sectores de la grada, un buen número de consignas pidiendo la marcha de Chen Yansheng, presidente y propietario del club perico, como el “que se vayan” o el “estamos hasta los h...”. Pero tampoco se libró el director deportivo, Domingo Catoira, a quien se llegó a insultar, e incluso, mientras duraba el 0-3, cánticos como “jugadores mercenarios” o “esta camiseta no la merecéis”. Lo que había comenzado en el descanso viró con la reacción. En Valencia, el domingo, se esperan más de 700 pericos.