De Paul: “Me falta mucho por dar al Atlético”
El centrocampista argentino analiza el Mundial y su papel como rojiblanco en la revista Rolling Stone. “La gente tiene muchas ganas de que Messi gane este Mundial”.
Mientras Simeone reconoce en una entrevista con Direct TV que espera en el Atlético al De Paul de Argentina, horas después el propio De Paul se desnuda ante la Rolling Stone. De sensaciones y casi del cuerpo, donde protagoniza una sesión de fotos luciendo tatuajes y habla de todo (el Mundial, su relación con Messi, que no estén terminando de salirle las cosas en el Atleti...). O casi todo más bien. “¿Está tranquilo mentalmente alguien que en los últimos días apareció en la prensa más por las especulaciones en torno a su noviazgo y la polvareda que levantó su presencia en la gala de los premios Billboard en Miami, cuando había pedido un permiso especial para faltar en un partido contra el Sevilla por la Liga Española luego de jugar unos amistosos con la selección? A juzgar por su apariencia, la respuesta es sí”, relata el autor de la entrevista, sin profundizar en lo que sucedió. “Como la idea de este encuentro con él no es aportar más material al tenebroso universo del panelismo, de los temas de la intimidad se habla lo justo y en un tono mesurado”, explica el periodista, a continuación. Y ya. No hay más referencia al suceso en esta entrevista profunda que lo recorre todo. Desde sus inicios al Mundial que viene. De su paso por el Atleti sin peso. De momento.
-Mundial: “Los días son un poquito más largos, pero es algo normal faltando tan poco. Es una mezcla de sentimientos… A veces uno puede ponerse nervioso por toda esta expectativa, por las ilusiones que este equipo genera hoy en todo un país. Pero los jugadores con experiencia ya sabemos cómo manejarlo”.
-Principales rivales en Qatar: “Brasil me parece un equipazo. No sé dónde leí el otro día que de los últimos cincuenta partidos que jugó perdió uno solo, con nosotros, en la final de la Copa América. Francia también tiene jugadores que están en un nivel extraordinario. Son los últimos campeones y ahora suman a Benzema en un gran nivel. España me parece una selección que juega muy bien al fútbol. Tiene uno de los mejores técnicos del mundo, de hecho. Alemania es siempre para respetar. Y está Inglaterra, que jugó la última final de la Eurocopa… La verdad es que será una competencia muy dura. No sé si alguna vez hubo un mundial con tantos candidatos firmes. Todos con distinto fútbol, pero siempre con un nivel muy alto. Yo creo que esta Copa del Mundo se va a definir por detalles: por acumular dos amonestaciones y quedarte afuera, por que un jugador se lastime… Son las cosas que pueden terminar pesando cuando el nivel es tan parejo. Van a ser siete finales, un mes muy duro. Hay que estar en óptimas condiciones físicas y mentales. Nosotros llegamos bien. Estamos en ese pelotón del que estoy hablando”.
-Estado de forma: “Físicamente estoy muy bien porque soy una persona que se cuida. Entreno mucho, dedico mi vida cotidiana al fútbol y eso hace que me sienta muy bien, que llegue entero. Es verdad que hay muchas cosas que te las dan solo los partidos, la continuidad: la dinámica con la que manejás la pelota, los controles, todo eso te lo va dando jugar seguido. Es importante llegar con una carga de minutos encima, y yo no estoy jugando siempre en el Atlético de Madrid. Pero ahora, faltando tan poco, no me parece algo primordial. Lo importante es llegar bien física y mentalmente, como decía recién. Si el mundial se hubiera jugado en julio, hubiésemos llegado más desgastados, pero Qatar nos encuentra en mitad de la temporada, entonces estamos mucho mejor. Mi pronóstico es que nos espera un mundial de muy buen fútbol”.
-Atlético: “Me falta mucho por dar acá. La historia en el Atlético empezó hace apenas un año y medio, y en todo ese tiempo hubo momentos muy buenos y otros no tanto, yo lo sé. Pero siempre fui autocrítico. También sé que puedo dar más. Creo que el equipo merece que yo le dé más. Y estoy trabajando para eso, buscando ser mejor, ser protagonista. Mis compañeros confían mucho en mí, pero todos sabemos que se trata de un proceso en el que las cosas se van a ir dando de a poco. Cuando trabajás y estás tranquilo mentalmente, las cosas funcionan”.
-Simeone: “Diego es una persona que transmite mucho el valor de ganar. Vive para el fútbol y tiene una pasión muy a flor de piel. Esa es una gran virtud. Lo importante es que sabe transmitir esa pasión. Porque hay gente apasionada en cualquier tipo de trabajo, pero capaz que no transmite, que no contagia. Diego es muy gestual, habla mucho con el cuerpo y te contagia esa pasión que siente por el fútbol, por ganar, por vivir de esto y para esto. Te hace dar cuenta de dónde estás, de lo que vale ese lugar. Tenemos una relación cercana porque somos argentinos y porque yo me veo reflejado en muchos aspectos cuando pienso en él como jugador. Me pasaba cuando no lo conocía, y ahora, que lo conozco, esas cosas cobraron mucho más valor y fomentaron una relación que yo siento muy cercana. Como técnico, es uno de los mejores del mundo, de eso no hay dudas. Ha hecho con el Atlético de Madrid cosas increíbles, al margen de todo lo que ganó. No es fácil mantenerse en un club como este más de diez años, llevarlo a Champions League, ser siempre protagonista. El Cholo ya es parte de la historia grande de este club”.
-Fútbol, infancia: “Yo entendí, y también me hicieron entender muy rápido, que tenía facilidad con la pelota. Era algo que me salía con una gran naturalidad, entonces me divertía mucho. Cuando de chico jugás bien, te volvés más popular en el barrio. Y a mí todo ese personaje me gustaba. Creo que por eso tengo hoy esta personalidad. Me hice notar y me vinieron a buscar. Primero, de Independiente, cuando yo jugaba en el club del barrio, y les dije que no. Le dije a mi mamá, literalmente: ‘A Independiente no voy’. Estaba escrito que yo tenía que jugar en Racing. Soy hincha de Racing, le debo mucho a ese club. Llegué cuando tenía ocho años y estuve diez años ahí adentro todos los días. Es imposible que no haya algo entre Racing y yo –grafica con una frase de resonancia lírica–. Racing fue mi infancia, me permitió darle a mi familia un pasar mucho más lindo que el que había tenido siempre, me educó… Racing es una parte muy importante de mi vida”.
-Inicios fútbol: “Yo entendí, y también me hicieron entender muy rápido, que tenía facilidad con la pelota. Era algo que me salía con una gran naturalidad, entonces me divertía mucho. Cuando de chico jugás bien, te volvés más popular en el barrio. Y a mí todo ese personaje me gustaba. Creo que por eso tengo hoy esta personalidad. Me hice notar y me vinieron a buscar. Primero, de Independiente, cuando yo jugaba en el club del barrio, y les dije que no. Le dije a mi mamá, literalmente: ‘A Independiente no voy’. Estaba escrito que yo tenía que jugar en Racing”.
-Racing: “Soy hincha de Racing, le debo mucho a ese club. Llegué cuando tenía ocho años y estuve diez años ahí adentro todos los días. Es imposible que no haya algo entre Racing y yo. Racing fue mi infancia, me permitió darle a mi familia un pasar mucho más lindo que el que había tenido siempre, me educó… Racing es una parte muy importante de mi vida”.
-Rol en el campo: “Siempre me gustó tener un rol importante, nunca fui de pasar inadvertido. Pero en la selección tenemos un líder que es muy grande, una figura muy importante, alguien que, además de jugar como juega, con la palabra ya simplifica todo. Obviamente, cuando habla Leo se lo escucha con mucha atención. Entonces el rol que intento cumplir en la selección es del lado del ejemplo: entrenar a full, que el equipo sepa que siempre puede contar conmigo dentro y fuera del campo, entender cada momento que pasamos, aportar alegría, diversión al grupo. Eso te lleva a ser un referente. Pero no es solo un tema de actitud. Cuando las cosas te salen bien dentro de la cancha, tus compañeros empiezan a confiar más en vos, a respetarte más también fuera del campo. Creo que todo eso me condujo a ser no sé si un líder, pero sí un jugador importante dentro de la selección argentina. El líder es Messi”.
-Personalidad en el campo: “Es la personalidad que me llevó a estar donde estoy. A mí no me asusta el contexto. Confío mucho en mis condiciones. En momentos delicados prefiero agarrar la pelota y absorber las presiones, pero no porque crea que mis compañeros no pueden. Es más una cuestión de instinto, es lo que me sale, lo que me pasa por dentro. Así actué toda mi vida, en la cancha y afuera. Hago lo que siento que debo hacer, aunque a veces pueda arrepentirme. Soy un pibe que actúa en base a lo que vibra, a lo que le pasa en cada momento”.
-Cambio en su fútbol tras el Valencia, en Udinese: “Ese cambio en mi forma de jugar fue muy paulatino. Casi todos se empezaron a dar cuenta cuando estaba en Italia, pero yo lo venía trabajando antes, pensando en ser un jugador más completo para lograr todo lo que quería. Cuando me fui de Argentina, las condiciones que tenía me alcanzaron para irme al Valencia. Pero para llegar a la élite, para poder jugar en la Champions League todos los años y ser parte de una selección importante, no alcanza con eso. Las condiciones me permitieron llegar, pero no me iban a permitir mantenerme los diez años que ya llevo en Europa. Tuve que sumar capacidades. Y me esforcé mucho para conseguirlo porque estaba convencido de que era por ahí. Lo hice guiándome una vez más por mi instinto, y hoy puedo decir que no me equivoqué”.
-Influencia de su posición en el campo: “Empecé a jugar más como un interno, a hacer el recorrido de toda la cancha. Eso se afirmó en Italia, y cuando me vieron en la selección se magnificó mucho más, como era esperable. Pero yo subrayo que es algo que vengo trabajando hace mucho. Me gusta cómo juego hoy porque recibo mucho la pelota y, al estar muy bien físicamente, también puedo aportar en la recuperación. Hasta ahora es donde más cómodo me he sentido en la cancha”.
-Tiempo libre: “De chico yo era bastante callejero, me gustaba mucho pasar el tiempo con mis amigos. Después la vida me fue llevando a que me guste más quedarme en casa. Cuando elegís esta profesión, sabés que hay cosas que no podés hacer, hay que aceptarlo. Pero la verdad es que tampoco me imagino una vida distinta a la que tengo. Hace mucho que convivo con esto y me gusta lo que me tocó. No me puedo quejar”.
-Círculo: “Un grupo de amigos que no llega a diez, los de toda la vida, mis padres, mis hermanos, Tini y sus padres”.
-Relación con noticias falsas: “Pueden decir lo que quieran, a mí no me afecta. Pero me duele cuando los afecta a ellos. Siento que los tengo que cuidar”.
-Copa América: “Yo creo que esa Copa que nos llevamos está entre los más grandes logros de la selección argentina, junto con los dos Mundiales que se ganaron (1978 y 1986), las dos últimas finales que se perdieron [N. del R: se refiere a las de 1990 y 2014, aunque hay una tercera más lejana en el tiempo, pero igual de importante para la historia futbolera vernácula, la de 1930] y el partido de Maradona contra los ingleses. Fue algo muy grande lo que pasó”.
-Crítica: “No me afecta, soy un profesional y puedo manejarlo. En el fútbol convivís con la crítica y el elogio constantemente, va oscilando de un lugar a otro. Pero al final todo depende de lo que hagas dentro de la cancha. Si el domingo hago un golazo, mi vida cotidiana pasa a un segundo plano y me van a llenar de elogios. Y si juego mal, la crítica puede ser muy dañina. Mucha gente cree que el jugador de fútbol es un robot. Como no se sabe mucho de la vida íntima de un futbolista, se inventan cosas. En relación a mi vínculo con Tini, al principio me costó entender cómo funciona todo porque yo vengo de otro palo, pero ya no me afecta demasiado. Tengo las cosas bastante claras. Sí me afectó cuando se puso mal ella o sufrieron mi mamá y mis hermanos por alguna mentira que se dijo. Se dicen falsedades para generar escándalo. Tanto yo como mi familia tuvimos que entender esa lógica y hacer oídos sordos a las pavadas. Como yo controlo personalmente mis redes sociales, me contengo para no contestar y que se arme una bola de nieve. En el último año fueron muchas las burradas que dijeron sobre mí. El trabajo del periodismo, hecho en serio, es muy respetable. Hay que ser muy inteligente para hacerlo. Pero no sé si todos están preparados, si son inteligentes. Muchas veces se desvirtúa ese trabajo, hacen que pierda valor. La función del periodismo es informar, no desinformar”.
-Deseo para el final de su carrera: “Antes de retirarme me gustaría ganar una Copa Libertadores con Racing. Pero, bueno, la vida va pasando, y desde que yo me fui de Argentina, el país ha desmejorado en muchos aspectos. Ya llevo casi diez años viviendo en Europa, no sé qué puede pasar. No tengo planes de seguir vinculado con el fútbol, no me veo mucho como técnico. Hay que estar muy preparado para llevar la vida tan particular que lleva un jugador. Hace unos días estuve en Bélgica, por ejemplo, pero no puedo decir que conozco algo de ese país: vas del avión al micro, del micro al hotel y así… Es una vida rara. No podés disfrutar de cada lugar al que vas, y a mí me gustaría empezar a disfrutar. Ser entrenador es aún más demandante que ser jugador. Entonces hoy no lo veo. Capaz que más adelante cambio de opinión, pero no creo”.
-Vida post fútbol: “Lo que a mí más me gusta, lo que más deseo hoy, es estar más tiempo con mi mamá −responde él−. Ella es una persona muy importante en mi vida y, por más dinero que gane, yo sé que no puedo comprar tiempo. Hace muchos años que no paso un cumpleaños o un fin de año con ella. También quisiera estar más tiempo con mis hijos (Francesca, de tres años, y Bautista, de apenas un año y tres meses, ambos fruto de su relación con la modelo Camila Homs), tenerlos mucho más cerca que hoy. Y estar más con mi novia, con mis amigos. Pasar el tiempo con la gente que quiero y haciendo lo que quiero. Pero ya habrá tiempo para todo eso. Mientras tanto estoy contento porque me dedico a lo que amo. Juego en un club importante como el Atlético de Madrid, juego en la selección, tengo un buen pasar económico… No es todo en la vida, pero estoy conforme. Y no siento que el dinero me haya cambiado, para nada. Tengo una manera de ver la vida que no pasa por el dinero, trato de ser muy desprendido, de ayudar a mis amigos, a mi familia. Quiero que ellos puedan tener también una buena vida. Yo estuve del otro lado y sé que cuando estás apretado con la plata el día a día se hace difícil. Sí pasó que me hice más duro, más frío. Me han pasado cosas que me llevaron a ese lugar. He atravesado algunos momentos que me han hecho mal y trato de cuidarme”.
-Regate en el fútbol: “Hay muchas cosas que están calculadas, mecanizadas. Hoy los entrenadores tienen mucha más preponderancia en el armado de los partidos, eso se sabe de sobra. Pero el fútbol es tan lindo porque se pueden romper los esquemas. Y los esquemas los rompe el que gambetea, y el que gambetea nunca va a dejar de gambetear. Yo no sé cuándo el otro va a gambetear, eso no se puede prever. Y en el momento en el que alguien te gambetea, se abre el partido. En esa improvisación está el encanto del fútbol. Y eso también se puede aplicar para algunos momentos de la vida”.
-Futbolistas que cambian partidos: “Modric. Vos podés estar muy cerquita de él, pero de repente hace un control que te elimina y cambia todo el panorama. Jugadores que sorprenden hay unos cuantos: obviamente, Messi, antes que ningún otro; después Cristiano, Benzema, el Cuti Romero, que para mí es un crack”.
-Maradona: “Estaba nombrando a los que juegan hoy, pero Diego fue lo máximo, eso es claro. Lo vi más en imágenes de archivo que en vivo, por una cuestión de edad. Pero también tuve la suerte de conocerlo. Diego fue el que nos llevó a muchos a querer ser jugadores de fútbol, él les permitió soñar a los chicos de cualquier barrio. Cuando jugás en la selección argentina crece mucho más el amor que sentís por Maradona. Empezás a interiorizarte de lo que hizo desde el lado sentimental con la selección, a conocer historias de la gente que trabaja hace años en el predio de la AFA y te das cuenta de lo que representa. Es una persona muy importante para la Argentina, y no estoy hablando solo de fútbol”.