Cuando Gattuso espiaba a Setién
El italiano mandaba a un ayudante para grabar los métodos de entrenamiento y el juego de posición del cántabro durante su etapa en el banquillo de Las Palmas
“Lo que veo en los equipos de Setién es lo que tengo en la cabeza”. La frase es del Gennaro Gattuso cuando era entrenador del Nápoles, en la previa de un enfrentamiento contra el Barcelona de Quique Setién en la Champions League. Gattuso se confiesa admirador del estilo del técnico cántabro y así lo recordó en la entrevista que concedió a AS. Este sábado se enfrentan en La Cerámica con Villarreal y Valencia respectivamente, en el que será el quinto duelo entre ambos técnicos que conciben el fútbol de manera parecida. Hasta la fecha, la balanza cae del lado de Setién, con dos victorias y dos empates.
Gattuso era un entrenador en ciernes cuando el módelo Setién brillaba en Las Palmas. Hablamos de 2015 y 2016, cuando Gattuso dirigía al Pisa de la Serie C y antes de recalar en las inferiores del Milán. “Aquella Unión Deportiva Las Palmas despertó mucha admiración y en Italia sobre todo”, recuerda Toni Cruz, director deportivo en aquella época, que incluye a Roberto De Zerbi entre los técnicos italianos que tomaban con asiduidad nota del trabajo del cántabro.
“Lo que veo en los equipos de Setién es lo que tengo en la cabeza”
“Yo mandaba a una persona a grabar su juego de posición”, recuerda Gattuso, interesado en esos años en los métodos de entrenamiento de Setién, un técnico siempre abierto a permitir a otros colegas tomar notas sin los miedos que cada vez hay más en el fútbol a ser espiados. “Recibíamos muchas peticiones para asistir a los entrenamientos y a los partidos, ni Setién ni Eder Sarabia ponían trabas, al revés, tienen un punto didáctico y pedagógico”. Gattuso, figura reconocida allí donde fuera, delegaba en uno de sus ayudantes la grabación presencial, unos vídeos que después devoraba el italiano.
Setién, de hecho, no supo de la admiración de Gattuso por su estilo hasta que se enfrentaron por primera vez en la Europa League. Uno entrenaba al Betis y el otro al Milán. Curiosamente ambos llegaron al primero de los dos duelos cuestionados en sus clubes y del primero de los envites de la liguilla de grupos salió airoso Setién. El Betis logró en San Siro una victoria de prestigio (1-2) y Gattuso fue sincero: “Después del primer gol tuve la sensación de que el marcador pudo ser de 0-4 ó 0-5. El Betis nos destruyó por calidad de juego”. En el Benito Villamarín empataron y finalmente el Betis pasó y el Milán se eliminó.
Gattuso salió sin venir a cuento en defensa de Setién
Gattuso, curiosamente, ese mismo año, sin venirle a cuento ni ser preguntado por eso, salió en defensa de Setién tras la eliminación del Betis contra el Stade Rennais en dieciseisavos de final: “Ví anoche el Betis-Rennais y había aficionados del Betis, que es uno de los equipos que más cosas hacen, que pitaban cada vez que el balón llegada a su portero para iniciar jugada… A uno ya no le puede sorprender nada”. Setién, tiempo después, cuando Europa volvió a cruzarles, le devolvió el reconocimiento: “Le doy mucho valor a sus palabras. Me siento halagado y es un orgullo que un grande como él dijera esas palabras sobre mi trabajo”.
Setién y Gattuso se han enfrentado en cuatro ocasiones, con dos victorias para el cántabro y sendos empates
El destino quiso que se vieran las caras en el debut de ambos como entrenadores en la Liga de Campeones. Fue en la eliminatoria de octavos de final entre el Nápoles y Barcelona. Setién había sustituido a Valverde y Gattuso demostró en la previa su forma de preparar los partidos al detalle. “El Barça desde que ha llegado Setién recupera el balón en solo seis segundos, con Valverde tardaba diez”, apostilló. Aquella eliminatoria estuvo condicionada por la pandemia, ya que la ida se jugó en febrero, con empate a uno en un partido dominado por los italianos, si bien, la vuelta no se disputó hasta agosto, con una actuación decisiva de Leo Messi. Aquel fue el penúltimo partido de Setién como entrenador hasta su inesperada vuelta a los banquillos en La Cerámica. Ahora, 875 días después, el cántabro y Gattuso volverán a coincidir en el derbi de la Comunitat Valenciana, un partido que a buen seguro dejará resaca en aquel que salga derrotado, más si fuera Setién.