Claudio Bravo y Guardado, renovaciones a la vista

El Betis avanza en algunos detalles de su planificación del futuro pese a que aún no tiene a un director deportivo en escena para suplir a Antonio Cordón. Pero no hay pausas en Heliópolis. Y hay dos nombres propios de mucho peso sobre la mesa: Claudio Bravo y Andrés Guardado, que terminan contrato este próximo verano, tienen casi todas las papeletas para renovar por otra campaña más. A sus 40 años, Bravo tiene la confianza intocable de Manuel Pellegrini. Guardado, con 36, es uno de los capitanes de esta plantilla. En la entidad creen en sus rendimientos y en la mezcla de juventud y veteranía que puede mantenerse en el bloque.

También hay un factor clave en estas posibles renovaciones venideras. Manuel Pellegrini resulta indispensable en la toma de la decisión y para él ambos forman parte de su plan. Siempre tuvo una especial debilidad con Bravo pese a que ahora Rui Silva reina en la portería y parece estar un escalón por encima del chileno. Considera que Bravo tiene un peso en el vestuario y su liderazgo es un arma añadida a sus virtudes sobre el césped. El técnico sabe que a nivel deportivo tiene también ciertas garantías que quizás sean difíciles de encontrar en el mercado. Con Guardado también ejecuta esa idea: sin ser un protagonista absoluto, resulta una pieza importante en su plantel y su rendimiento no se minimizó respecto al pasado año.

El club confía en cerrar esas dos renovaciones a sabiendas que quizás el mercado no entregue posibilidades de mayor grado en esas posiciones. La portería, sobre todo, es un escenario de interrogantes cuando surge la necesidad de encontrar una nueva pieza. Con Bravo hay una sintonía correcta y Rui Silva encuentra también un aliado inmejorable en su crecimiento. A sus 40 años, trata de tener minutos aunque ya no alcance esa cifra de 25 partidos por la que renovaría de forma automática. Bravo y Guardado tienen aún fútbol para todos. Y quieren seguir reflejándolo en el Betis.