Chimy Ávila: “No ha cambiado la ilusión de la gente, queremos revancha”
El delantero, que llega con Osasuna al Bernabéu este sábado, analizó en el Club del Deportista el dolor navarro por la eliminación en la previa de la Conference League.
El CA Osasuna llega al Santiago Bernabéu después de un inicio de temporada donde el equipo de Jagoba Arrasate no pudo conseguir la ansiada clasificación a la Conference League, algo que el propio Chimy Ávila sigue digiriendo: “Duele sobre todo por la ilusión que tenía toda la ciudad, la ilusión nuestra. También duele por la manera en que hemos perdido... Pero bueno, hay que buscar revancha, que es lo que te da el fútbol”, explica el argentino. Pese a no poder conseguir jugar en Europa esta temporada los jugadores de Osasuna siguen palpando la ilusión de la afición en Pamplona. “No ha cambiado la ilusión de la gente, más allá de quedar fuera de Conference League, la ilusión sigue siendo la misma y por eso trabajamos cada día y queremos revancha para trabajar y lograr que así sea”, confirma Chimy. Otro de los títulos que tiene por disputar esta temporada el conjunto rojillo es el de la Supercopa de España, un título que entrarán en juego el propio CA Osasuna, Real Madrid, FC Barcelona o Atlético de Madrid: “Los jugadores, la afición, toda la ciudad está ilusionada. Es una competencia muy bonita, de jugarla y de vivirla”.
“EL BÚHO SE ME APARECIÓ EN UN SUEÑO”
Uno de los tatuajes más característicos de Chimy Ávila es un búho que tiene en su cuello, en El Club del Deportista nos explica el por qué de ese llamativo tatuaje. “Surgió porque yo tuve la pérdida de tres familiares muy importantes en mi vida, y una noche me voy a dormir y durante la madrugada sueño con ellos. Los veía que venían caminando hacía el paraíso y con un búho atrás que los iban guiando y protegiendolos. Me levanté al día siguiente, llamé al tatuador y le dije que quería hacérmelo. El búho se me apareció en el sueño con esas tres personas especiales para mí y por eso me lo he hecho”, comentó el delantero osasunista. Sus comienzos en el fútbol en Argentina vienen marcados por la peculiar forma en la que el padre del Chimy obligaba a que diese al balón: “De chiquito. Mi padre me ponía con un balón de baloncesto a pegar contra un paredón que teníamos en casa. A golpear con una pierna, a golpear con la otra, con ambas piernas, y fui agarrando el golpeo así. Hoy creo que puedo pegarle igual con las dos piernas”. Además también explicó a los que considera sus mejores amigos en el mundo del fútbol. “He tenido muchos compañeros con los que tuve mucha afinidad como Enric Gallego, el pipí Romagnioli, Damián Mustio, Gonzalo Bergessio... De todos he aprendido mucho porque siempre he tenido compañeros mayores que yo, con una trayectoria muy bonita, y de cada uno rescato algo bueno que me han enseñado”, concluye Chimy Ávila.
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