Chicco no quiere dejar el Leganés
El argentino está en la lista de transferibles del club, pero su intención es quedarse. La falta de fichajes y su polivalencia juegan a su favor para continuar. Le resta un año de contrato.
Julián Chicco no quiere salir del Leganés. El centrocampista argentino de 26 años es uno de los jugadores que el club puso entre los potenciales transferibles a principio del verano. Un elenco en el que figuraban también Aritz Arambarri, Naím García, Javier Avilés, Lalo Aguilar y Luis Perea. Éste último ya ha salido tras rescisión unilateral de contrato. Un despido, vaya.
En el caso de Chicco (al que le resta un año de contrato), sin embargo, las intenciones del club (que en comunicación con otros clubes ha hecho circular esta lista de descartes) chocan con las del futbolista, que no contempla una potencial partida visto ahora que el Leganés ya está en la máxima categoría, algo que representa una gran oportunidad para cualquier jugador.
Sucede, además, que la ausencia de fichajes hace que Borja Jiménez, el técnico de los pepineros, vea en él un futbolista más del plantel, con oportunidades de tener protagonismo en este inicio de temporada. Este sábado, en el amistoso con el que el Leganés ha cerrado su estadía en Inglaterra (cero a cero ante el Sheffield Wednesday) Chicco fue titular después de superar unas molestias físicas que le habían impedido competir en los dos primeros partidos de preparación. Ya ante el Burnley tuvo algunos minutos.
Polivalencia y adaptación como virtudes
En Hillsborough, Chicco ejerció en el eje del mediocampo junto a Neyou en un rol que le sienta bien. De hecho, la pasada temporada en Segunda División, este ex de Boca Junniors fue importante en las ocasiones en las pudo gozar de minutos, algo que no siempre ocurrió con la regularidad que él le habría gustado. Y aún así, cumplió. Su polivalencia (puede competir de central, puesto para el que el Leganés no anda sobrado) es otro factor más que juega a su favor en este inicio de temporada.
Entre tanto, el Leganés mantiene un extraño equilibrio entre las salidas y las entradas, toda vez que las primeras son necesarias para que se produzcan las segundas… pero a falta de fichajes el Leganés no puede dar vivacidad a sus transferibles. Galimatías que no es nuevo en Butarque y que, presumiblemente, se irá desenmarañando con el final del mercado. En el caso de Chicco, si el Leganés quiere una salida, lo tendrá complicado. A menos que la opinión del chaval cambie o el club opte por medidas drásticas, como ha sucedido con el caso de Perea, al que incluso retiraron su dorsal y dejaron sin viajar a Reino Unido, aunque la versión oficial es que arrastraba molestias que le impidieron viajar.
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