Catoira: “Tenemos que ser conscientes de la realidad del club”

¿Qué nota le pone al mercado de fichajes?

No soy yo quien se la tiene que poner. Nosotros hicimos una perspectiva de trabajo al inicio del mercado, una vez conseguido el ascenso, en la que obviamente ha habido cambios derivados de diferentes circunstancias a las que nos hemos ido adaptando. Hemos confeccionado la plantilla que, en parte, teníamos en mente. Habíamos preparado para este mercado en torno a seis o siete incorporaciones, dejando una en el aire en función de situaciones que se pudieran dar. Han sido cinco, más las compras obligadas, y, en ese sentido, estamos relativamente satisfechos, porque creo que hemos confeccionado una plantilla competitiva en la que creemos a ciegas.

¿Ha provocado el cierre del mercado alguna tirantez con su entrenador?

No, porque le hicimos cómplice desde el día uno de la situación deportiva y de la económica, de todos los jugadores que iban a llegar y priorizando a los jugadores que fueron llegando en cada momento. Compartimos esa necesidad del lateral zurdo específico porque nos hubiera dado más herramientas, pero es conocedor de todas las dificultades y tenemos una dirección y un camino único, que es perseguir la permanencia.

No cumplieron ni el objetivo del lateral izquierdo ni con las salidas...

Sigo manteniendo que la plantilla es un poco larga; nos habría gustado trabajar con 22 o 23 jugadores, y sí echamos en falta un lateral izquierdo natural. Repito también que el año pasado nosotros trabajamos con siete jugadores en el reparto defensivo, que son los que tenemos ahora contando a Raúl Chasco, y tenemos a Lucas Rosa, que ya cumplió bien el año anterior y ha sido uno de los mejores jugadores de estas cuatro primeras jornadas.

¿Por qué no ha venido el lateral?

Como comentaba antes, a nivel estratégico estaba marcado de una forma y el calendario nos obligó a apurar alguna contratación de cara a la primera jornada de Liga. Alrededor del 20 de julio recibimos una notificación de LaLiga con un ajuste importante de ‘fair play’ y nos adaptamos, modificamos la estrategia y hemos cerrado el mercado de la mejor forma que hemos entendido para pelear la permanencia. Los últimos días trabajamos en esa posible incorporación y el club ya había asumido unos riesgos importantes para cerrar la plantilla como lo habíamos hecho. Podíamos haber incorporado algún jugador por número, pero entendimos que no iba a cambiar en exceso la situación y hemos decidido esperar al mercado de enero.

¿Tiene que ver esa comunicación de LaLiga con lo que sucedió con Thiago Araújo?

No tiene nada que ver. Lo que sí modifica es la estrategia que teníamos en mente, qué prioridades había en la plantilla y en qué orden iban a poder ejecutarse. A partir de esa comunicación, el presidente hace un esfuerzo con una ampliación de capital y, con todo eso, no llega, y tenemos que adaptar la parte final del mercado a las circunstancias que tenemos. Como digo, a nivel deportivo ya teníamos en mente que este año pudiera tener mayor protagonismo Lucas Rosa, en quien creemos mucho y tiene esa virtud que queremos resaltar de la polivalencia. Entendimos que no era el momento de focalizarnos en el lateral izquierdo y que iba a haber margen durante el mercado.

Teniendo en cuenta esta decisión, ¿se podría haber quedado el club a Boyomo?

Ha venido un jugador, que es Cenk, en su lugar, pero, además, las ventas no te impactan de manera directa; lo que nosotros podíamos utilizar de la venta de Boyomo es el salario y la amortización que te deja, no el remanente una vez descontado todo eso. Eso te impacta en la temporada que viene, e insisto, hay que cubrir una serie de objetivos anuales que, incluso a día de hoy, no están cubiertos a 30 de junio con Monchu y Boyomo. Tenemos que ser conscientes de la realidad del club y de lo que te permite LaLiga. Esas obligaciones tú decides cuándo decides cumplirlas, y si nosotros hicimos esa venta es porque entendíamos que teníamos, como mínimo, un jugador que iguala su nivel. Podríamos haber continuado teniendo a Boyomo, aunque estaríamos más lejos en lo económico; hemos buscado un equilibrio. Efectivamente, puede tener una revalorización mayor en el futuro, pero si se hubiera quedado aquí no estaríamos más cerca del objetivo de ventas o podría haber una pérdida de ese valor por una lesión o por un descenso. Hemos hecho la venta porque las tres partes, incluido el jugador, estábamos de acuerdo y salíamos beneficiadas.

¿A qué se debió el fichaje de Biuk?

Al conseguir el objetivo del ascenso a Primera División, se llevó a cabo una compra obligada y a nivel técnico hablamos de que quizás no tuviera los minutos esperados, y decidimos que fuera cedido, porque hemos intentado adquirir algunos jugadores para que el club tuviera un valor de cara a tener las ventas obligadas por LaLiga, que se producen con jugadores de determinada edad y determinado perfil futbolístico que puedan ser susceptibles de ser ventas y equilibrar esa obligación económica. Hemos decidido que salga cedido para que la inversión, que es menor de cuatro millones, no pierda valor, precisamente para darle continuidad. Nos hemos guardado también una cláusula de recuperación en enero, por si pudiera volver con otro bagaje u otro impacto que el que iba a tener ahora mismo.

¿Era, por tanto, obligada esa compra?

La inversión se ha hecho así, por lo que no hemos podido decidir después; se decidió el pesado mercado de enero, y nos ayudó a conseguir el objetivo del ascenso. El reporte de esa inversión llegará o no llegará, a veces ese reporte es a corto plazo y otras más a largo plazo.

¿A qué se debe el lastre económico del club?

No hablaría de lastre. El club se ha convertido en un club ascensor-descensor, es así de sencillo, y eso es algo que estamos intentando cambiar, pero eso no se hace en un año. Para cambiar eso es tan sencillo como mantenerse en la primera temporada. La única forma de cumplir los objetivos que te limitan es manteniéndote en Primera División y empezando a generar una plantilla mucho más homogénea en todos los sentidos. Si no consigues en primer objetivo, que es mantenerte, no es fácil, pero no somos ni el primer club ni el único al que le ha pasado esto.

¿Cuál es la situación de Aceves?

Nos comunicó este lunes la intención de reintegrarse a los entrenamientos. Había incurrido en una situación un tanto extraña y, por correo, nos comunicó eso. A partir de ahí, hay una parte jurídica que hay que ver cómo solucionamos, aunque a nivel deportivo el club le abre las puertas, más allá de creer que se ha equivocado. Como decían su contrato y su licencia federativa, está inscrito con el filial.

¿Cuál es el motivo de las restricciones económicas, teniendo en cuenta las ventas numerosas del verano pasado?

Yo llevo un verano aquí. Entiendo que esas ventas fueron para cubrir los objetivos de venta de LaLiga y para paliar pérdidas de temporadas anteriores. Esto es un modelo continuo al que te obliga LaLiga en función de donde estés, que puedes llevar a cabo o no, y te repercute o te ayuda a paliar mercados posteriores. Antes de esas ventas, el club hizo un mercado muy agresivo para intentar la permanencia y de ahí esa situación. La realidad es que nosotros recibimos esa notificación esa temporada y nos adaptamos.

¿Hay margen salarial de cara a enero?

Estamos en la regla del 1:1; en el escenario teóricamente ideal, y lo que consigamos sacar, vamos a poder meterlo en la plantilla, ya sea a través de traspasos y beneficio neto y salarios o que el club pueda acometer nuevos ingresos a través de acuerdos comerciales.

¿Cómo valora el inicio de temporada?

El inicio creo que ha sido muy positivo, aunque el resultado de Barcelona distorsiona la imagen que puede tener la gente sobre el equipo, que no creo que sea la real. El equipo se debe acercar más a lo que fue las tres primeras jornadas. No buscamos excusas, como tampoco en lo económico, pero creo que la semana se nos hizo larga en lo competitivo.

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