Buscando al Pedri de siempre

Pedri se fue destrozado en el minuto 99 del Athletic-Barça. Su imagen valía más que mil palabras. Los 94 días de baja que ha acumulado esta temporada se notan y, pese a que está haciendo esfuerzos de todo tipo, aún no está fino físicamente y no pesa lo que suele sobre el campo. Los números contra el Athletic en comparación con el resto de centrocampistas resultaron muy llamativos. Mientras De Jong intervino 117 veces en el partido y Gündogan se quedó a una de las 100, Pedri no pasó de las 52. El canario, además, firmó un 81% de acierto en el pase, lejísimos del 93% del holandés y el alemán. Pedri tampoco estuvo entre los mejores recuperadores del partido mientras el ex del Ajax quitó nueve balones; y el ex del City, diez.

Fue un Pedri empequeñecido, que tampoco apareció en el último pase. Un jugador con menos frescura de la que acostumbra, que sufre más que disfruta en el campo, algo imposible de ver en sus primeras dos temporadas de azulgrana, cuando fue una extensión de Koeman y Xavi en el campo. El jugador ejemplar, como le definía Xavi. El que aclara todo. Es necesario, sin embargo, mirar la problemática de Pedri con perspectiva. Apenas pasa de los mil minutos esta temporada (1.057′) en 16 partidos. Pedri necesita coger ritmo, chispa y fondo físico. Los más impacientes pueden desesperar pero, si se ve el vaso lleno, es fácil pensar que, si le respetan las lesiones, la mejor versión del canario se va a ver en el último tercio de temporada, lo que le permitiría llegar en un momento óptimo a la fase decisiva de la Champions y a la Eurocopa, en la que si España le necesita si pretende alcanzar las rondas finales. De momento, a Pedri le toca acumular minutos y fortalecerse este mes para llegar a tope a la cita en el viejo San Paolo (hoy estadio Diego Maradona) el próximo 21 de febrero.