Bronca a Monchi tras saludar a su afición
El director deportivo saltó al césped del Villamarín para agradecer el apoyo de sus hinchas y algunos empleados del Betis recriminaron su actitud.
El derbi dejó algunos momentos de tensión entre Betis y Sevilla a la finalización del choque. El reparto de puntos dejó posiblemente insatisfechas a ambas partes, pero no todo quedó ahí. El director deportivo del Sevilla, Monchi, saltó al césped a saludar a los más de 500 aficionados del Sevilla que estuvieron presentes en las gradas del Benito Villamarín, pero en su regreso vivió la reacción de varios integrantes de la entidad verdiblanca que no dudaron en recriminar su actitud.
La bronca a Monchi llegó por parte de gran parte de la afición verdiblanca mientras él levantaba el puño y se golpeaba el pecho agradeciendo el apoyo incondicional de sus hinchas en las gradas del Villamarín. Mientras regresaba, algunos empleados del club se dirigieron hacia él para mostrarle su contrariedad hacia ello. En pleno contexto de tensión, hasta aparecieron futbolistas para evitar que esa lucha de discrepancias llegara a más. Bono frenó al miembro del cuerpo técnico del Betis que trataba de ir hacia Monchi y también Canales apareció en escena para tratar de calmar los ánimos de todas las partes.
Además, el colegiado del encuentro, Sánchez Martínez, desvela en el acta un altercado en los vestuarios. “Una vez finalizado el encuentro y cuando nos encontrábamos en el vestuario, se produjo un altercado en el túnel entre jugadores y técnicos de ambos equipos. Al salir de nuestro vestuario, ambos equipos se retiraron, no pudiendo identificar a los iniciadores de dicho altercado. El coordinador de seguridad nos indicó que no se pudieron identificar a ninguna persona implicada en el incidente”. Igualmente, el acta expone a Gonzalo Montiel a una sanción superior a un partido: “Cuando dicho futbolista se retiraba a la zona de vestuarios después de ser expulsado, se dirigió al cuarto árbitro en dos ocasiones con su dedo en la sien, en clara señal de que estábamos locos”.