REAL MADRID | BRASIL, TRAS EL ITALIANO
Brasil suspira por Ancelotti
La CBF salta a la palestra a través de su presidente: “Es el favorito de los jugadores y la afición”. El italiano prioriza cumplir su contrato con el Madrid.
Brasil estrecha su cerco sobre Carlo Ancelotti. La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) quiere atajar la situación de inestabilidad de la selección canarinha (sin entrenador desde el adiós de Tite tras el Mundial) que se vio reflejada en la derrota en Tánger del pasado sábado contra Marruecos (2-1). Quieren que Carletto lidere los nuevos tiempos de esta Brasil en la que conoce muy bien a veteranos (Casemiro), casi noveles (Militao, Vinicius, Rodrygo...) y hasta a la clase media, como por ejemplo Richarlison, al que hizo crecer en el Everton.
Las pesquisas de la CBF con los jugadores con los que ha trabajado Ancelotti, frecuentes en los últimos meses, han dado paso a declaraciones en las que se habla directamente del italiano. “Ancelotti es unánimemente respetado entre los jugadores, no sólo Ronaldo Nazario o Vinicius, también todos los que jugaron para él. No sólo es el favorito de los jugadores, también parece que lo es de los aficionados porque a cada estadio que voy me preguntan por él”, declaró ayer Ednaldo Rodrigues, el presidente de la CBF, a Reuters. “Admiro su honestidad y la manera tan honesta en la que trabaja, es un entrenador top con grandes éxitos y esperamos que tenga incluso más...”. Una insinuación de que el elegido es Carletto. “Tengamos fe en Dios, esperemos el momento adecuado y veremos si podremos hacerlo posible”.
“Seremos éticos, respetaremos los contratos en vigor, otra cosa sería faltar el respeto al presidente de un club”
Un interés que de momento no se ha plasmado en un acercamiento directo a Ancelotti, aunque sí que le llamó de manera informal una figura tan importante en el fútbol brasileño como Kaká. El expupilo de Carletto en el Milán colabora con la CBF sin cargo oficial, aunque su trato con el organismo ha aumentado porque es el enlace elegido para afrontar el siguiente paso por Ancelotti si el interés por el transalpino se lleva a una siguiente fase.
La discreción de la CBF con el asunto Ancelotti ha saltado por los aires aunque Ednaldo Rodrigues insiste en que lo que suceda, será con pleno conocimiento de Florentino Pérez y el Real Madrid aunque no mencione ni al dirigente ni al club blanco de manera directa. “Seremos muy éticos en nuestro planteamiento y respetaremos los contratos en vigor. También respetamos mucho el trabajo que realiza cualquier entrenador y su club para llegar hasta ahí y hacer cualquier tipo de planteamiento, sería una falta de respeto al presidente de los clubes en cuestión”. Sea como fuere, el plan inicial de la CBF es esperar hasta el final de la temporada en Europa para contar con el nuevo técnico. Pero la derrota de la verdeamarelha en Marruecos y la cercanía del Mundial Sub-20 en Indonesia (del 20 de mayo al 11 de junio) en el que ya quieren involucrado al nuevo seleccionador (aunque sea, evidentemente, de una manera tangencial), ha acelerado este cerco a Ancelotti.
Los tiempos los marca la situación del Madrid
Pero lo que suceda con el italiano queda a expensas de otros tempos, que son los del Real Madrid. Ancelotti no ve con malos ojos la opción de Brasil, pero su prioridad absoluta es cumplir su contrato en el Madrid hasta junio de 2024 y si no lo amplía más, incluso contemplar de manera seria la retirada en ese momento.
Y el timing en el Real Madrid vendrá marcado, de manera muy relevante, por la participación del equipo blanco en esta Champions. De hecho, la final de Estambul podría alargar la temporada del Madrid (si sigue avanzando en esa competición) hasta el 10 de junio...
Brasil ha pasado a hacer una ‘espera activa’ con Ancelotti que no se limita a la bromas entre el técnico y los internacionales brasileños desveladas esta semana por Rodrygo (“Decimos que haremos juntos las alineaciones”) y Vinicius. La CBF, en la figura de su presidente, cada vez es más explícita en su interés y se encomienda “a Dios” para conseguir el fichaje de Carletto. No es poca cosa.