Borja Iglesias, el goleador de moda al que le “flipa” Vallecas
El delantero bético, que se convirtió en el villano de la pasada Copa para los rayistas, elogia el ambiente de Vallecas: “Jugar aquí es de las mejores experiencias que he tenido”.
Borja Iglesias está de moda. Al carismático delantero, de 29 años, se le caen los goles de los bolsillos. Esta temporada lleva ocho y se confirma como el pichichi del Betis. Sin embargo, no tiene lejos otros retos también apetecibles. Se encuentra a un tanto del espanyolista Joselu, que ahora mismo es el máximo artillero nacional y a cinco del azulgrana Lewandowski. Así, con esas cifras en la cabeza, visitará este domingo al Rayo.
El Panda ha marcado a los franjirrojos cuatro goles en nueve partidos a lo largo de su carrera. Vistiendo la camiseta del Espanyol les hizo dos (18-19) y con la del Betis, otros dos, en la Copa del pasado año. El delantero fue determinante para acabar con el sueño rayista de disputar su primera final del Torneo del KO en toda la historia. Se convirtió en el villano de aquellas semifinales, pero siempre ha tenido elogios para la atmósfera que se vive en Vallecas.
“Es muy bonito. Venir a jugar en este estadio es de las mejores experiencias que he tenido. Ya me pasó en Segunda. Hay muchísimo ambiente y su afición está volcada con ellos”, destacó el bético en la rueda de prensa posterior al partido de ida de aquella eliminatoria. Esos halagos no fueron algo aislado. Borja Iglesias concedió una entrevista a ‘Yo, interneto’ y él mismo sacó el nombre de Vallecas mientras debatían sobre la importancia del ambiente. “Los aficionados allí están muy cerca y si pasas por detrás de la portería te tocan. A mí me mola. Vallecas es de los campos en los que más he notado el fenómeno ambiental. A mí me flipa. La afición del Rayo a veces me insulta un poco, pero a mí me flipa Vallecas”, confesó.
También recordó una anécdota junto a su compañero y amigo Dimitrievski, el guardameta del Rayo, que este domingo tendrá que secar al nueve. “Me expulsaron en Segunda porque tenía una amarilla y, en un córner, toqué un poco a Dimi y se tiró al suelo. Me expulsaron. Nos llevamos muy bien, pero ahí me la hizo. No había VAR y me tuve que ir para casita”, rememoró entre risas el gallego.
Y es que Borja Iglesias es un futbolista diferente. Se ha significado en temas sociales. Aún está en el imaginario colectivo su foto con las uñas pintadas de negro y su respuesta a las críticas e insultos recibidos. “Es una forma de concienciarme y luchar desde mi posición contra el racismo, pero creo que también me viene bien contra la homofobia. Además, tengo que admitirte que me gustan”, manifestó el jugador en sus redes.
Además, participó en el programa ‘Salvados’ hablando de política. A la pregunta, ‘¿En el fútbol hay más jugadores de izquierdas o de derechas?’, él respondió: “El futbolista tiende a ir a la derecha, no muy extrema, pero a la derecha”. Los motivos a los que apunta son principalmente económicos. “Si te están diciendo que, en lugar de pagar el 50% de impuestos, vas a pagar el 30%, pues piensas que fantástico. Prefiero pagar más y vivir en un país en el que me gusta lo que se hace con ese dinero”, afirmó el delantero bético.
Además, el Panda ha hecho hincapié en la importancia de la salud mental (”Llevo trabajando con una psicóloga desde que estuve en Zaragoza. Tenemos que normalizarlo y cuidarnos en lo bueno y lo malo”) y se ha mojado también contra el machismo o las casas de apuestas (”A mí no me gustan, prefiero ganar menos y que no estén”, zanjó).