Bloqueo en el Barça
La negativa de Ferran a salir, unida a la de Ansu, ha frustrado la hoja de ruta del club, que no ha ingresado nada por ventas. Las llegadas de un lateral y un volante creador, paradas.
Ferran Torres dejó una de las noticias de la gira justo antes de que el Barça abandonase Los Ángeles rumbo a Dallas. “Tengo contrato y voy a quedarme”, dijo el valenciano en la zona mixta del SoFi Stadium después de jugar y marcarle un gol al Arsenal. Desafiante, Ferran aseguró que “los nombres los colocan los periodistas” cuando se le preguntó si seguía en el mercado. “Estoy capacitado para jugar en el Barça y lo que se diga de mí me da igual. La recompensa llegará. Soy el primer autocrítico. Aprendí mucho el año pasado y esos altibajos que tuve me están ayudando en esta”, insistió el internacional en su mensaje, contundente.
El mensaje de Ferran confirma el bloqueo en el Barça, que ha visto frustrada la hoja de ruta que estableció a finales de mayo, cuando ya era campeón de Liga. Por entonces, Xavi dio la autorización a Mateu Alemany de activar las salidas de Ansu y Ferran, que eran las dos grandes ventas que podía hacer el Barça y que podía abrir la puerta a los fichajes que deseaba el técnico. Entre ellos, alguno que ya suena lejanísimo como Zubimendi.
El asunto se fue torciendo para el técnico, que tenía en la cabeza una plantilla que no es la que ha visto estos días en los entrenamientos del Memorial Coliseum. A su regreso de la Final Four de la Nations League, donde por cierto estuvo a buen nivel en la final de Rotterdam contra Croacia, Ansu le confirmó a Jorge Mendes, su representante, que no iba a moverse del Barça. Firmó una renovación hasta 2027, lleva el dorsal ‘10′, se siente querido y está bien en casa y convencido de poder triunfar. Pareció que con Ferran habría movimiento. Hasta se especuló con la posibilidad de que acompañase a Mateu Alemany camino del Aston Villa. Pero lo del ejecutivo mallorquín se quedó en un gatillazo que ha tenido continuidad con el portazo definitivo del valenciano este miércoles.
Para rematar, Ferran le vendió versatilidad al entrenador: “Puedo jugar de extremo derecho, izquierdo, de delantero centro e incluso de segunda punta. Y en cuantas más posiciones juegue, más puertas me abriré”, dijo en la zona mixta después del partido contra el Arsenal. A día de hoy, el Barça no ha ingresado un solo euro procedente de salidas. Busquets no renovó su contrato, Alba y Umtiti rescindieron su contrato; y Pablo Torre ha llegado cedido. A cambio, el Barça ha incorporado libres a Gündogan e Iñigo Martínez y ha pagado unos 3,5 millones por Oriol Romeu.
La situación ha sido límite, al punto de que el Barça, para inscribir a los fichajes y a los jugadores renovados, se ha visto obligado a ‘inventarse’ una palanca que permitirá que LaLiga le devuelva los 60 millones que le había bloqueado por impago de la palanca de Barça Studios.
A 27 de julio, el problema para Joan Laporta es que no podrá cumplir los deseos de su entrenador, que quiere un lateral derecho y un centrocampista creador, si no vende activos. Salvo sorpresa, los únicos jugadores que pueden ser traspasados antes de que se cierre el mercado son Lenglet, Dest, Kessié y Abde. Los dos primeros no cuentan para el entrenador, pero no dejarían mucho dinero en caja. Los casos del marfileño y el marroquí son distintos. Ambos están abiertos a salir, pero el Barça intenta apurar para conseguir ofertas potentes que le permitan tener fairplay suficiente para poder fichar. De momento, continúa el bloqueo y la sensación de que, salvo sorpresa (un ofertón por Raphinha), el Barça lo va a tener imposible para cumplir el plan que se había propuesto cuando empezó el verano.