Balde: el regreso del amo y señor de la banda izquierda
El lateral, que en su día fue capaz de sentar a Jordi Alba, ante el Manchester City en Orlando participó en un partido 189 días después de lesionarse.
Alejandro Balde fue uno de los primeros jugadores del FC Barcelona que pudieron hablar con Hansi Flick a su llegada. Por esos días, el joven defensa se encontraba en la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí recuperándose de su lesión mientras que al técnico alemán le hicieron un tour por las instalaciones del club después de firmar su contrato. Coincidieron y en ese pequeño intercambio de palabras, Balde le aseguró: “Estaré preparado para la pretemporada”, a lo que Flick respondió: “Perfecto, nos vemos entonces. Te deseo todo lo mejor”.
El pasado 25 de julio Balde recibió el alta médica, después de seis meses justos que se lesionara de gravedad ante el Athletic Club en la Copa del Rey. Sufrió una lesión en el tendón del isquiotibial del muslo derecho que requirió pasar por las manos del doctor Lasse Lempainen, que lo operó en Finlandia. A finales de enero, la temporada se acabó para él. Hasta ese momento, había disputado un total de 28 partidos, repartidos en 18 de Liga, 6 de Champions, 2 de Copa del Rey y los 2 de la Supercopa de España con un gol y una asistencia.
Ante el Manchester City en el primer partido de la gira americana, Balde regresó 189 días después de lesionarse. Entró en el minuto 74 sustituyendo a Gerard Martin y disputó el tramo final del encuentro. Marcó el tercer penalti en la tanda pero lo más importante es que pudo seguir recobrando sensaciones y coger ritmo de competición para cuando empiece la temporada oficial. Hansi Flick quiere convertir a Balde en su ‘Alphonso Davies del Barça’. Un lateral ofensivo de largo recorrido y con una capacidad física para ocupar buena parte del carril izquierdo.
Su proceso de recuperación ha sido lento y momentáneamente truncó una trayectoria que parecía imparable. “La parte más dura son las lesiones. Pero es parte del camino y del proceso. Lo más importante es saber salir de ahí y volver lo mejor posible”, reconoció a ESPN. Fue Alejandro Balde el joven capaz de mandar al banquillo a un lateral de leyenda en el Barça como Jordi Alba. Los dos convivieron en ese primer año completo de Xavi Hernández que acabó con el título de Liga en el bolsillo. Al ahora jugador del Inter de Miami le tocó aceptar un rol secundario -aunque fue decisivo en algunos partidos- por la aparición de un auténtico cohete en la banda izquierda.
Rápido y explosivo, a Balde solo le faltaba mejorar la toma de decisiones en el tramo final de las jugadas para convertirse en un lateral espectacular. “Es un portento físico. Es joven, tiene cosas que mejorar, pero creo que ha hecho una gran temporada pese a su juventud. No tenía mucha experiencia a sus espaldas y ha rendido muy bien. Tiene mucho margen de mejora. Es un chico al que le gusta escuchar y aprender y eso es importante para seguir creciendo. Estoy convencido de que, con Balde, el Barça tiene lateral izquierdo para la próxima década”, dijo Alba sobre él.
La llegada de Balde a la élite del fútbol fue muy rápida. A los tres meses de ser titular ya fue convocado para jugar el Mundial de Qatar. “Fue difícil de asimilar. Solo llevo un par o tres de años de carrera y siempre intento mejorar”, dijo. Agradecido a Xavi por hacerle fijo en el equipo y por consolidar tantos jóvenes, el lateral reconoció que con Hansi Flick han variado un poco la filosofía de juego. “. Hay algunas diferencias. Hay que ver como es el fútbol hoy en día y hoy es más físico y directo y nos tenemos que adaptar”.
A la espera de lo que pase con Cancelo, no se atisban nubarrones en el camino de Balde para recuperar su condición de amo y señor en el lateral izquierdo. Los que deberán darle descanso todavía son más jóvenes que él aunque están preparados. Hablamos de Álex Valle y Gerard Martín.
Les espera una temporada muy exigente en la que deberán competir contra el Real Madrid de Vinicius y Mbappé. Balde está convencido que tienen calidad suficiente para disputarle todos los títulos y aseguró que en el curso pasado por culpa de “pequeños detalles” no pudieron luchar hasta el final por todos los títulos.