VILLARREAL
Baena marca por segundo año un ritmo de récord en tarjetas
El futbolista, con 15 tarjetas amarillas, fue de los más amonestados la temporada pasada en Segunda, mientras que con ocho ya lidera la tabla de amonestados en esta campaña.
Álex Baena es uno de los jugadores más destacados del Villarreal y uno de los jóvenes valores de Primera. En el campo da muestra de su calidad y la capacidad desequilibrio, a lo que suma un carácter fuerte y muy competitivo. Ese carácter, le hace ser ahora mismo uno de los dos jugadores de la liga que más tarjetas amarillas ha visto. En estas estas primeras 20 jornadas, el joven futbolista del Villarreal encabeza la lista de amonestados junto a Carles Aleñá del Getafe, con ocho tarjetas cada uno. Valga como dato que la temporada pasada el jugador más amonestado del Villarreal en toda la temporada fue Capoue, que vio nueve tarjetas en todo el curso.
Una situación que no es una novedad para el futbolista, ya que la temporada pasada en el Girona ya fue uno de los futbolistas que más tarjetas amarillas vio en el campeonato, con 15 cartulinas, acompañando Roque Mesa y Aitor Sanz en la parte alta de la tabla de esta clasificación. Baena suma dos años consecutivos de buen ritmo de partidos en el fútbol profesional, tras jugar la temporada pasada en Segunda División y la actual con el Villarreal en Primera. Un periodo de año y medio en el que acumula 24 tarjetas amarillas en los campeonatos ligueros, cinco tarjetas amarillas en la calle Copa del Rey y cuatro tarjetas amarillas en la Conference League. Un total de 33 tarjetas amarillas en 72 partidos, por lo que su media es de una tarjeta cada dos partidos. Un registro alto para un jugador creativo, que ve muchas tarjetas por reiterar protestas y por su carácter.
Una situación que desde el club se busca revertir, aunque se le ve también la parte positiva del carácter competitivo. Algo que él técnico Quique Setién valoraba así. “Tú al futbolista lo tienes que asumir como es. Sabes que es su carácter, y así como vaya sumando años, sabes que irá madurando e irá controlando mejor estas emociones. Aceptamos que tenga ese carácter, lo hacemos para lo bueno y para lo malo. Él ya sabe que tiene que corregir esto, sabe que no es la primera vez que le pasa, y que debe saber corregir esta situación. Pero a veces, ese carácter que tiene nos vale mucho, por su agresividad, por la recuperaciones, y por todas las cosas que también nos aporta en el campo. Lo que hace falta es que vaya madurando y entendiendo que tiene que aprender a controlarse de mejor manera”, comentó Setién.