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VALENCIA

Auditoria externa para evaluar el coste del Nuevo Mestalla

El Ayuntamiento aprueba una moción para “exigir eficazmente las garantías que aseguren el coste total y que las obras no volverán a ser paralizadas”.

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Una persona contempla parte del Proyecto básico reformado de obras y actividades del nuevo estadio del Valencia CF que el club ha mandado al consistorio. EFE/Kai Försterling
Kai FörsterlingEFE

El Ayuntamiento de Valencia se cura en salud con la obra del Nuevo Mestalla. El consistorio, con los votos a favor de PP, VOX, Compromís y la abstención del PSPV-PSOE, ha aprobado en la Comisión de Urbanismo una moción alternativa para encargar una auditoría externa para evaluar el coste de las obras del estadio del Valencia. El club, en su último proyecto presentado, cifra en 122 millones (antes de impuestos), el total de la obra que queda por construir, una cifra que el Ayuntamiento cotejará con dicha auditoría.

Tal como se apunta desde el equipo de gobierno (PP y VOX), el objetivo de la moción aprobada es “garantizar la seguridad jurídica y exigir eficazmente las garantías que aseguren el coste total de las obras y que las mismas no volverán a ser paralizadas”. El grupo VOX, en su comunicado oficial, incluye el término avales junto a la palabra garantías (lo pone entre paréntesis), si bien, el comunicado oficial del Ayuntamiento se ciñe únicamente a “garantías”. El Valencia, que todavía no ha tenido notificación oficial al respecto, valorará este nuevo contexto una vez tenga la notificación por parte del consistorio.

Desde el Ayuntamiento se ha notificado que la auditoría se realizará “antes de una eventual aprobación de cualquier convenio o de las fichas (en su caso) en favor del Valencia CF SAD”. La moción alternativa, con variaciones a una primera presentada en su día por Compromís, incluye un segundo punto y es paralizar cualquier “cuestión” relacionada con el Valencia y su nuevo estadio “hasta que se conozca la votación y fallo previsto para el 6 de marzo sobre la ATE del Valencia”. Este punto ha salido adelante con los votos a favor de PP y VOX y en contra de Compromís y PSPV-PSOE.

Hay que recordar que ese día el TSJCV dará respuesta a la demanda presentada por el Valencia por la que entiende que en su día tenía derecho a que le aprobarán una prórroga de la ATE, que fue anulada por la Generalitat Valenciana.

De esta forma, el Ayuntamiento, principalmente el equipo de gobierno, que está dividido en el sentido del voto y que sabe que cuenta con el rechazo de la oposición, gana tiempo tanto por la auditoría externa como por la segunda moción para no tener que llevar a votación del Pleno del Ayuntamiento la aprobación de las fichas urbanísticas vinculadas hasta después de ambos procesos.

Catalá: “Es fruto de la voluntad de consenso”

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, valoró la moción aprobada: “Es fruto de la voluntad de consenso que tiene el actual equipo de gobierno, porque nace de una iniciativa de Compromís y el equipo de gobierno ha cogido una parte de esa moción, que es la de la auditoria, con ese ánimo de consenso y hemos incorporado no avanzar en ninguna acción hasta el 6 de marzo por seguridad jurídica”. “Si todos estos pasos llevan a que haya un consenso por el Nuevo Mestalla, bienvenido sea”, apostilló.

“Es una auditoria externa que busca demostrar que el Valencia está en condiciones de poder financiar las obras, nada tiene que ver, y quiero aclararlo, con el convenio posterior ni los avales que solicitará el Ayuntamiento al Valencia para la fase constructiva”, recalcó la alcaldesa, que también habló sobre la candidatura de Valencia al Mundial 2030. “Hay una sintonía absoluta entre la Generalitat y el Ayuntamiento, pero no vamos a flexibilizar nada por ser sede del Mundial, vamos a trabajar esa candidatura de manera conjunta a la Generalitat”.

Por su parte, la portavoz del Grupo Municipal Socialista, Sandra Gómez, cuyos ediles han votado en contra de los dos puntos de la moción alternativa, ha manifestado su “profunda indignación” ante lo que ha calificado como “estrategia clara, sonrojante y abierta de María José Catalá para ponerle las cosas muy fáciles a Peter Lim y Meriton”. “Ha pasado de exigir de cara a los medios de comunicación y la opinión pública que desistiera de las demandas contra el Ayuntamiento a poner negro sobre blanco que está a la espera de que resuelvan los tribunales”, ha lamentado

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