Aspas, patata caliente para Benítez
El madrileño es el primer técnico que deja jugar al moañés por razones puramente deportivas. Ahora debe decidir si mantenerlo en el banquillo o devolverlo al once.
EI rol de Iago Aspas ha sido indiscutible en la última década. Desde su debut con el Celta en Primera en 2012 siempre ha sido un fijo para los diez entrenadores que pasaron por el banquillo celeste. También lo estaba siendo para Benítez, hasta que el pasado fin de semana lo dejó todo el partido en el banquillo, siendo así el primer entrenador que decide no utilizar al moañés por una cuestión puramente deportiva.
Y es que la última vez que Aspas vio todo el partido desde el banquillo fue el 9 de mayo de 2021, cuando Coudet decidió no utilizarlo en Vila-Real para no arriesgar. El moañés entró en la convocatoria pese a estar tocado, pero el Celta encarriló el duelo en la primera parte (1-3) y sentenció al inicio de la segunda mitad (1-4), así que el Chacho prefirió dar descanso a su estrella. Dos años antes, en febrero de 2019, Aspas tampoco saltó al campo en casa frente al Levante. El motivo es que seguía sin recuperarse de una lesión que le había mantenido un mes en el dique seco y el partido quedó liquidado a la hora (0-3).
En la temporada 2016-17, Berizzo no lo utilizó en cinco partidos de Liga debido a las rotaciones, ya que el Celta estaba inmerso en Copa y Europa League, llegando a semifinales en ambas competiciones. El Toto ni siquiera convocó a Aspas ante Leganés y Betis y no necesitó utilizarlo ante Granada, Athletic y Málaga, tres duelos que finalizaron con resultado de 3-0, el primero a favor y los dos últimos en contra. Un año antes ya había hecho lo mismo entremedias de la eliminatoria copera frente al Atlético, cuando no citó al delantero para viajar a Vallecas.
Esta vez la cuestión es diferente y el resultado cosechado en Pamplona (0-3) deja una patata caliente en el tejado de Benítez, que deberá decidir si dar continuidad al equipo que venció a Osasuna o devolver a Iago Aspas su habitual rol de titular indiscutible. El moañés llegó a calentar en Pamplona, pero finalmente no saltó al terreno de juego. De hecho, Benítez prefirió no agotar los cambios antes que dar entrada al diez. Es la tercera vez que el entrenador madrileño sienta a Aspas este año, aunque en las dos anteriores, frente a Las Palmas y Rayo, sí le dio minutos en la segunda parte.