Arrasate: “En Vallecas se vive el fútbol de verdad”
El de Berriatua tiene claro que pese a haber dicho adiós a las aspiraciones europeas quieren acabar la temporada lo más arriba posible.
-¿Cómo se buscan los estímulos para este final de temporada?
No es nada nuevo. Llevamos años en Primera con un final de Liga en el que hemos estado en esta situación o parecida y el equipo siempre ha competido, ha querido más, ha ganado en campos complicados… Quedan siete partidos que dan para mucho y vamos a Vallecas con toda la ilusión del mundo. Es un campo, un escenario que nos gusta porque ahí se vive el fútbol de verdad. También va a ir gente de aquí y yo creo que son estímulos suficientes para intentar ganar mañana.
-¿Estar lo más arriba posible en la clasificación ya es una motivación?
Sí. Siempre tiene que ser y eso lo tenemos que tener muy en cuenta. Es un partido de Primera División, fuera de casa… Vamos a intentar ganar, conseguir tres puntos y seguir en esa estela. Ahora somos undécimos, empatados con el noveno… A ver si somos capaces de conseguir una buena clasificación, que para el club también es importante.
-A los jugadores, ¿los ve en esa dinámica?
Sí. Los jugadores, más allá de las bajas que tenemos, los que están disponibles están muy enchufados. También tenemos al Promesas, que nos puede ayudar. Eso no es excusa, el equipo va a salir a ganar.
-¿Cómo llegan después del palo deportivo y emocional del lunes?
El martes estás alicaído, dándole vueltas al partido, a cómo ha sido, a la derrota… Pero luego el miércoles, como no entrenamos, ayer ya estábamos a dos días de otro partido, hoy es previa… Ha sido una semana muy corta y es lo mejor que nos podía pasar para activarnos rápido y pensar en el siguiente partido. Si estamos mirando al que ya ha pasado, no tenemos nada que hacer.
-Mañana es su partido 250 al frente de Osasuna…
No lo sabía. Es un número muy redondo. A ver si podemos celebrarlo con una victoria. Estaría bien.
-Y ante un discípulo…
También. Tengo ganas de estar con él, saludarle y saber cómo le va. He visto desde la distancia estos siete partidos de Iñigo y tengo ganas de estar con él y ya no de ganarle, porque no es una pelea entre él y yo, pero que podamos ganar. Luego ya habrá tiempo para estar con él.