Aprobados y suspensos: La lluvia desatasca al Pucela

El Real Valladolid goleó al Celta en un partido en el que se desmelenó en la segunda mitad, liberándose después de hacer el 2-1 en una acción a pelota parada (la segunda del choque). Plata, Óscar Plano y Sergio León encontraron espacios para machacar a los de Coudet, que terminaron goleados sin remisión bajo la lluvia de Zorrilla.

Masip: Detuvo bien abajo el primer disparo celtiña. En el segundo, el del gol, no pudo hacer nada. Estuvo firme, aunque no le buscaron demasiado. Tras la acción más clara fue ovacionado, después de parar en dos ocasiones el penalti de Iago Aspas, que se tuvo que repetir.

Joaquín: Corrigió bien en un contragolpe amenazador que bien pudo convertirse en el 1-2 en el inicio del segundo tiempo. Se elevó por encima de todo el mundo para imponerse en la disputa y marcar el 2-1. Estuvo solvente en los duelos aéreos y certero en los envíos en largo.

Feddal: Contundente, ‘empujó' a los delanteros hacia su propio campo. Larsen le abrió las costuras en la jugada del gol. Cometió un penalti en el intento de despeje precisamente ante el punta noruego, que se las hizo pasar canutas. Al margen de estas dos acciones (que ya son bastante decir), dejó buenas sensaciones.

Javi Sánchez: No pudo coger a Óscar Rodríguez en la contra del empate, aunque le acortó metros. Guardó las espaldas a Olaza para que apareciera en una segunda altura, aun sin desmelenarse. Como sus compañeros en la zaga, defendió bien el área. Estuvo flojo con el balón en los pies, algo impropio en él.

Lucas Rosa: Metido e intenso persiguiendo a Cervi en sus primeras apariciones. Se animó también a subir, aunque con poco acierto en el centro. Cerca del descanso tuvo un pequeño descuido a la espalda que corrigió abajo. No lo tenía fácil con Javi Galán enfrente, y sin embargo, se destapó con una buena actuación.

Roque Mesa: Adelantó a los blanquivioletas con un buen disparo desde la frontal, en un saque de falta. Volvió a probar fortuna con otro tiro que obligó a repeler a Marchesín. Bregador, en su línea, aunque seguramente la lluvia le jugó también alguna pasada, lastrándole en algunas entregas.

Aguado: Acertó al entregarle el cuero a Roque Mesa en el balcón del área en lugar de botar la falta al punto de penalti. Lo intentó, pero no llegó a cortar la contra del empate. La puso bien al punto de penalti para que Joaquín hiciera el 2-1.

Kike Pérez: Partido deslucido, menos brillante que otros días. Como siempre, intentó aparecer en muchas zonas, pero no se acabó de encontrar cómodo ni terminó de hallar el lugar real donde percutir entre el ‘diamante’ celtista. Fue sustituido en el primer turno de cambios.

Olaza: Subió con menos frecuencia que Lucas Rosa, y sin embargo, asistió en uno de los goles de Sergio León. Premió sus centros desde tres cuartos, cuantiosos, pues realizó hasta once envíos laterales o en largo, aunque apenas dos hallaron destino. No sufrió en defensa.

Sergi Guardiola: No pudo dar el apoyo a Weissman en una buena jugada entre ambos. Se le vio lento de reacción en algunas jugadas. En la que acaba con el tanto del empate, busca una extraña chilena. No se termina de encontrar, pese al trabajo que defiende Pacheta que hace.

Weissman: Más participativo en los primeros compases que en anteriores encuentros, en los que apareció fuera de su zona de influencia para tocar más el balón. Su mejor acción acabó con un taconazo hacia Guardiola que este no controló. Fue a menos, aunque el desgaste fue importante.

También jugaron en el conjunto de Pacheta:

Óscar Plano: Su participación en el 3-1, decisiva: primero aparece en banda derecha para recepcionar de Lucas Rosa y virar el juego hacia el otro lado, hacia Olaza, tras apoyarse en Sergio León. Asistió en el 4-1, el del desmelene, después de otra gran jugada.

Sergio León: Se las ingenió para crear una clara ocasión nada más salir, la que acaba en el saque de esquina del 2-1. Aidoo le quitó el caramelo puesto por Lucas Rosa en un centro con marchamo de gol. Nadie lo pudo evitar cuando, a continuación, se ganó el sitio en el área. Falló el penalti, pero se desquitó enseguida.

El Yamiq: Reapareció con una semana de adelanto sobre el plazo más corto previsto por el club. Con él, se mantuvo el dibujo y la seriedad atrás, si bien el Celta ya no se encontraba a gusto cuando saltó al tapiz y no se vio amenazado.

Plata: Entró en posiciones interiores y en una de sus primeras galopadas recibió el agarrón de Aidoo para sufrir el penalti. Aparece en el inicio de la jugada en los dos goles de Sergio León, apoyando a Plano en ambos.

Malsa: Entró para dar refresco en la desgastada zona ancha en los minutos finales y apenas participó.